El caso cobró relevancia en la comunidad cuando las víctimas, estudiantes del secundario, comenzaron a relatar ante una tutora las situaciones que vivían en clase. Según se informó, el profesor, que no cuenta con formación pedagógica ni universitaria, estaba a cargo de dos materias. Tras conocerse los testimonios de los alumnos, el establecimiento educativo inició un sumario interno que culminó con su apartamiento. Sin embargo, la situación escaló cuando, hace aproximadamente una semana, los padres formalizaron las denuncias penales ante las autoridades policiales.
Una madre que presentó una de las denuncias —quien prefirió mantener su identidad en reserva— declaró ante este medio que las acciones del docente “afectaron profundamente a los chicos, algunos estudiantes están recibiendo asistencia psicológica”. Además, mencionó que la comunidad educativa había intentado abordar la problemática, pero que las respuestas no fueron suficientes hasta que se decidió proceder con las denuncias.
Posteriormente, la Fiscalía de Instrucción con sede en Huinca Renancó, a cargo de la causa, tomó intervención en el caso, secuestrando elementos probatorios e iniciando una serie de citaciones a los padres para que prestaran declaración. Mientras se desarrollan estas investigaciones, trascendió que el docente abandonó el país rumbo a los Estados Unidos. Según las fuentes consultadas, el viaje estaba programado para noviembre, pero fue adelantado tras conocerse las acusaciones en su contra.
“Algunos estudiantes están recibiendo asistencia psicológica”.
El impacto de las denuncias también se reflejó en redes sociales, donde una exalumna de la escuela relató haber vivido situaciones similares con el mismo docente desde 2019. En su publicación, describió las clases como “un calvario, un malestar constante”, y expresó su apoyo a quienes decidieron denunciar. “En su momento me quedé callada, porque cuando hablé, me dijeron que estaba exagerando”, comentó la joven, quien aseguró haber superado el difícil momento con el apoyo de familiares y amigos.
Mientras las autoridades continúan con la recolección de pruebas y testimonios, la comunidad de Villa Huidobro sigue con atención el avance de esta causa, que ha sacudido a la localidad y generado debates sobre la seguridad de los estudiantes en las instituciones educativas.