El obispo Adolfo Uriona dijo ayer que ya se formó una comisión diocesana con sacerdotes y laicos que está en conexión con la comisión formada desde el Episcopado para avanzar con el Sínodo de Obispos convocado por el papa Francisco.
“El objetivo es qué se piensa de la Iglesia”, indicó monseñor Uriona.
-¿Qué es un sínodo y cuál es el objetivo?
-Después del Concilio Vaticano II, el papa Paulo VI institucionalizó los sínodos de los obispos. Y Francisco ya convocó al Sínodo de la Familia. Y en estos sínodos se da una amplia consulta al pueblo de Dios. En este sínodo que se hará en octubre del 2023 el Papa no sólo quiere que se consulte al pueblo de Dios sino que también haya una participación mucho más activa del mismo. Incluso quiere que se consulte a aquellos que no participan habitualmente y que no vienen a nuestros templos. El Papa quiere que se consulte a todos y que esto lleve a la Iglesia a una actitud sinodal. Sínodo significa caminar juntos.
-¿Y qué se quiere consultar?
-Nosotros hemos formado un equipo de sacerdotes y laicos a fin de ir pensando las etapas de esta consulta. La idea es qué se piensa de la Iglesia.
-¿Cómo se va a ir operativizando esto?
-A eso lo estamos estudiando a nivel diocesano y también a nivel nacional, para ver cómo llegamos a todos. Por ejemplo, a través del Consejo Económico y Social. Estamos en una fase de búsqueda.
-¿La consulta será hasta abril del año venidero?
-Hasta abril del año próximo va a ser la consulta. Y lo indagado se enviará a la Conferencia Episcopal para una síntesis de todo el país que se enviará a Roma. El Vaticano preparará un documento previo que se remitirá de nuevo a las diócesis para la confección del documento final. Ese documento es el que tendrán los obispos en el sínodo en octubre del 2023.