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Aguante Poesía!, la fiesta de la palabra

Se llevó a cabo en la ciudad la XV edición del Encuentro Nacional de Escritores, Editores y Lectores de poesía

Durante cuatro días intensos se llevó a cabo una nueva edición del Aguante Poesía!, la edición número quince de manera consecutiva. Que se sostenga durante tanto tiempo evidencia que el Encuentro Nacional de Escritores, Editores y Lectores de poesía de Río Cuarto se consolida año tras año por la apropiación social y de los distintos grupos y generaciones de escritores y editores de la ciudad, en el marco de una política de Estado para la promoción del libro, la lectura y la escritura.

Los poetas volvieron a la presencialidad y de alguna manera a los abrazos. El año pasado el encuentro se desarrolló en su totalidad a través de plataformas virtuales. Este año el Aguante contó con dos nuevos espacios y escenarios poéticos, Casa de Poesía-Museo Betty Medina Cabral, inaugurada en marzo de este año como el primer centro cultural de la ciudad con nombre de mujer y al mismo tiempo, el primero vinculado específicamente al desarrollo de las Letras. Y el Bosque de la Poesía, inaugurado en el mes de abril en la margen sur de nuestro río, frente al Centro Cívico, donde se desarrolló una hermosa actividad que fusionó la danza y la poesía con lectura de poetas (se destaca la lectura de Leopoldo Teuco Castilla, creador del movimiento poético ambiental Bosques de la Poesía) y la participación especial del grupo Abriendo Surcos.

Estéticas y proyectos en diálogo

Si hay un objetivo de este encuentro es la de generar un espacio de “dialogo” entre la poesía local con la poesía que se escribe, se piensa, se edita en otras partes del país. Se sabe que la poesía vive al margen del mercado editorial, de ahí el nombre de Aguante. Lo que se destaca de este encuentro es que además de los poetas se suman los editores a las mesas de trabajo y a los lectores en un espacio abierto.

Este festival no está programado por un grupo que adhiere a una determinada estética. Esta manera de construir un espacio no es casual, es la conciencia de la heterogeneidad y la riqueza de la poesía argentina, y que la única manera de husmear esa riqueza es con debida generosidad y amplitud, para no quedar encerrados en una línea artística que se arrogue ser la poesía de hoy.

Otra de las claves del Aguante es que se constituye con un verdadero espíritu de camaradería. Se encuentra lejos de la idea de “evento”, es decir de lo efímero. Por lo cual poetas, lectores, editores, y periodistas especializados que vienen a Río Cuarto cada año siguen en contacto y trabajo permanente más allá de este encuentro anual que se vive como una fiesta.