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"El Niño" no será fuerte sino moderado y durará más tiempo de lo previsto

Hasta aquí se pensaba que podía declinar en febrero o marzo, pero ahora la situación cambió en el Pacífico y hay expectativas de que pueda continuar más allá de esa fecha prevista originalmente

El fenómeno climático "El Niño" no será fuerte sino moderado pero durará más que lo previsto, estimó la Bolsa de Comercio de Rosario en su último informe climático

Las condiciones de “El Niño” en el Pacífico ecuatorial se han estabilizado al nivel de un evento moderado y no tendrá la intensidad fuerte proyectada hace un mes atrás, indicó la BCR.

No obstante, aclaró la entidad, su acción ya empieza a sentirse en la región central de Argentina con eventos de lluvias recurrentes y a cada semana con mayor volumen y cobertura.

El consultor Alfredo Elorriaga explicó que “en septiembre, las anomalías positivas se debilitaron en el Pacífico oriental; y a mediados de octubre de 2023, las condiciones de El Niño en el Pacífico ecuatorial centro-oriental se han estabilizado al nivel de un evento moderado".

“Esta disminución de la intensidad del evento probablemente se verá reflejada en anomalías pluviales menores a las estimadas con las proyecciones de agosto 2023 que consideraban un Niño Fuerte”, completó.

Se moderó

Pero los nuevos pronósticos estiman una continuidad del evento de El Niño durante el resto de la primavera, verano y principios del otoño de 2024, cuando se esperaba una rápida declinación del ciclo y que el Niño terminara en febrero/marzo.

En julio GEA / BCR estimaba un “Niño fuerte”, con lluvias superiores a la media para octubre, en un rango de 30 a 40%.

Finalmente, en octubre se desarrolló un Niño moderado, con circulaciones frías y secas que recién en la última semana del mes comenzaron a disminuir, permitiendo lluvias con mayores volúmenes y una distribución más homogénea.

De esta manera, la región núcleo, en promedio, termina el mes alcanzando la media de octubre y puntualmente con casos que la superan.

Para el trigo implantado en esa región, las lluvias llegan muy tarde y se estima que solo el 20% del millón de hectáreas sembradas obtendrá rendimientos que generen un beneficio económico.

Por último, la BCR pronosticó para el inicio de noviembre un evento de similar importancia en volumen respecto a las últimas lluvias del fin de semana, que darían el puntapié inicial a la siembra de soja 2023/24 que se generalizará cuando los lotes permitan ingresar a trabajar, luego de días con mucha humedad y lloviznas permanentes.