El Servicio Penitenciario informó que una persona que se movilizaba en una camioneta arrojó un ladrillo de madera a la cárcel de nuestra ciudad, que contenía en su interior dos teléfonos celulares.
Las cámaras de seguridad de la Unidad Penitenciara Nº 6 captaron el momento exacto en que el elemento era arrojado al predio. Al ser inspeccionado, se descubrió que el paquete de madera contenía dos aparatos de telefonía.
En sus redes, el Servicio Penitenciario destacó: “Artesanías a otro nivel que no burlan nuestros controles“. Este tipo de maniobras no es nueva en la región; hace poco se identificó un caso similar en la cárcel de San Francisco, donde se encontró otro ladrillo con un celular camuflado.
En un video difundido por el Servicio Penitenciario se observa cuando una camioneta se detuvo al lado del paredón y una persona arrojó un paquete que cayó dentro del predio.
Este tipo de maniobras para hacer llegar teléfonos o drogas a los internos no son extrañas. Hace diez días, dos jóvenes que se movilizaban en una moto arrojaron un envoltorio a la cárcel que en su interior tenía cuatro celulares.
En marzo pasado, el personal policial y los guardiacárceles detectaron a un sujeto que había arrojado al interior del establecimiento una pelota con cuatro aparatos de telefonía.