Quedaron postergados para el 2026 varios de los puntos más sensibles: algunos habían sido cuestionados por distintos sectores, como los vinculados a naranjitas, cuidacoches y limpiavidrios.
Reformas
La Unicameral aprobó sanciones más severas para faltas como negarse sin justificación a identificarse, brindar datos falsos y evitar controles policiales, entre otras.
Por otra parte, se endurecieron las sanciones contra los organizadores de fiestas clandestinas.
La Justicia podrá decomisar parlantes, cables, consolas y bebidas utilizadas en estos eventos ilegales y solo podrán ser reclamados aquellos bienes que sean esenciales para la supervivencia.
La reforma estableció como contravenciones la agresión a personal educativo, de salud, de seguridad y bomberos, y la disposición ilegal de basura. También se modificó la Ley de Tránsito: busca adecuar la normativa a nuevas tecnologías, como la incorporación obligatoria de luces diurnas (DRL) en los vehículos.
La reforma a su vez “incorpora una dimensión restaurativa y victimocéntrica", poniendo el foco en la persona afectada por la contravención y se sumó la figura de la reiterancia: si una persona comete una o más infracciones, de la misma o distinta naturaleza, antes de que quede firme la sentencia anterior, podrá recibir sanciones agravadas.
Los temas que quedaron afuera
Tras un intenso debate en la Comisión de Seguridad, la Legislatura decidió postergar para febrero de 2026 la discusión sobre los puntos más polémicos: la regulación de los cuidacoches (naranjitas), la prohibición de limpiavidrios en semáforos, los requisitos para circular en moto con acompañante y las multas por no cumplir con el carnet de vacunación.