La marcha atrás de la Ley Ómnibus que el Gobierno había enviado al Congreso y que implicaba en un principio la suba de retenciones para los productos que ya pagaban más la aplicación de un 15% para todo lo demás, generó cierta intranquilidad en las filas de la dirigencia agropecuaria.
Es que luego de batallar durante semanas para que se diera marcha atrás con los derechos de exportación y haber logrado que se eliminaran para la mayoría de las economías regionales, y finalmente todo ese capítulo desapareciera junto a la quita del paquete fiscal, ahora la incertidumbre gira en torno a qué hará el oficialismo con todo ese paquete de iniciativas que naufragó en Diputados.
¿Volverá a insistir con algunas reformas? ¿Dividirá todas las propuestas que fueron en el marco de un megaproyecto para tratar tema por tema? ¿Desde dónde retomará el debate?
En este último punto radica buena parte de la duda del agro, que ya fue sorprendido en el comienzo de la gestión con la idea de aplicar una mayor carga tributaria al sector. Durante la campaña, casi todos los candidatos a presidente habían anunciado que avanzarían en una quita de retenciones hasta eliminarlas. El más enfático en ese marco fue Javier Milei. Por eso la sorpresa para muchos productores que además lo acompañaron con su voto.
“Con la vuelta a comisión de la ley ómnibus hay un riesgo de que el tema derechos de exportación vuelva a aparecer sobre la mesa. Lamentablemente vamos a tener que estar atentos a cómo se desarrolle todo y a qué quiere hacer el Gobierno, cuál va a ser su estrategia con respecto al proyecto”, explicó, a Tranquera Abierta, Santiago Ricca, de Barbechando, la entidad del agro que trabaja en las iniciativas legislativas que se llevan adelante en el Congreso.
El integrante de la Fundación remarcó que “el gran riesgo es que la marcha atrás implique volver a discutir derechos de exportación y tengamos que volver a pedir que se quiten esos artículos. Vuelve a aparecer. En realidad todos los temas que fueron quedando afuera pueden regresar, incluido jubilaciones”, advirtió.
En ese sentido, Ricca, oriundo de Alcira Gigena, indicó que “lo que ocurrió es raro, porque nunca va al recinto un proyecto que no tiene los votos asegurados. Ocurrió muy pocas veces: una vez con la ley del aborto y también con la 125. Fueron contados los casos. Pero lo importante es ver cómo sigue el Gobierno, si manda todo junto de nuevo o si lo hace por capítulos; y en ese caso hay que ver qué ocurre con el articulado fiscal que había sido retirado ya. Es una opción”.
De acuerdo al “poroteo” que tenía realizado Barbechando, de los capítulos referidos al agro que habían sido aprobados en general la semana pasada y persistían en la Ley Ómnibus que empezó a tratarse esta semana en particular, en el caso de Semillas había muchas dudas porque no se tenía en claro si estaban los votos para lograr la aprobación. Pero en el caso de los biocombustibles todo indicaba que sí estaban los votos necesarios y faena bajo jurisdicción federal también. “Eran temas que no estaban en la discusión, y cuando eso ocurre es porque mayormente hay consensos o no hay conflictos”, agregó Ricca.
Con respecto a la caída de todos esos temas, la valoración del representante de Barbechando no es totalmente negativa porque “lo que hizo la ley ómnibus fue también poner en agenda algunos temas del agro que no estaba. Los biocombustibles fue uno y la intención de buena parte de los diputados era subir el corte; en el caso de la faena no cambiaba demasiado la operatoria en algunas provincias, pero claramente no empeoraba la situación, al contrario; y lo de Semillas sí tenía diferencias intrasector, pero insisto en que era ganancia que se pusiera el tema en agenda. En ese punto algunos prefieren avanzar con la ley de semillas que quedó pendiente hace años y otros pretendían ir por la adhesión a UPOV91. Pero lo que sí, obligaba a sentarse a discutir”, insistió.
Para luego agregar: “Vamos a tener que estar en alerta, en particular hasta saber cómo piensa avanzar el oficialismo, y si cambia su postura de negociación con el Congreso, por ejemplo”.
Por último, Ricca destacó que “ahora estamos a la espera, mientras regresa también el Presidente del exterior. Pero deberíamos tener noticias la semana que viene porque además las extraordinarias se vencen el 15. Si llaman o no a prorrogarlas dará un indicio de lo que pretende. La otra opción es que al estar tan cerca del 1 de marzo quede todo para el período de ordinarias. Eso va a ser una primera señal. Hoy hay incertidumbre porque no se sabe cómo sigue el juego”, explicó el directivo de Barbechando.