La Fiscalía de Bolivia emitió hoy una orden de detención contra el ex presidente Evo Morales, quien no se presentó a declarar en una causa judicial.
El ex mandatario está siendo investigado por su presunta implicación en delitos de abuso de menores y trata de personas en 2016.
Morales reafirma su inocencia y alega amenazas de muerte y falta de garantías para su seguridad, de acuerdo con el sitio Actualidad RT.
El ex presidente del Estado Plurinacional de Bolivia considera a su vez que las autoridades actuales procedieron a la reapertura de un caso archivado, que asegura fue fabricado por el Gobierno de Jeanine Áñez.
Por la tarde del viernes, el líder del partido Movimiento al Socialismo, de 64 años, se atrincheró en su feudo cocacolero del Chapare después de denunciar que sufre una "persecución política" de parte del Gobierno de Luis Arce tras, no acudir a comparecer ante la Fiscalía que había solicitado su aprehensión.
Morales criticó al actual jefe de Estado boliviano a través de su cuenta de la red social X (antes Twitter): "El gobierno de Luis Arce es el peor desde 1982. El pueblo siente, desde hace mucho, que vamos muy mal. Una reciente encuesta hecha por Ipsos Ciesmori dice que el 96 por ciento de las personas en el eje central consideran que Bolivia va en la dirección incorrecta".
"Además que el 81 por ciento de la gente piensa que Bolivia tiene una economía muy débil. Eso es producto de la traición a nuestro modelo económico, a la corrupción y a la ineficiencia.
Debemos salvar Bolivia", agregó.
En tanto, sus seguidores realizan una vigilia en el feudo cocacolero con el objetivo de evitar el arresto del ex mandatario y amenazan con posibles piquetes y movilizaciones.
"Si detienen al hermano Evo Morales, inmediatamente se produce el bloqueo de carreteras en contra del gobierno de Arce por la crisis económica, corrupción y por persecución política", consignó en un comunicado el denominado Pacto de la Unidad, sindicato que respalda a Morales.