En el marco de la investigación por la muerte de Sofía Bravo (26), cuyo cuerpo fue hallado el sábado en La Carlota, la Justicia logró la detención de un camionero correntino de 22 años de edad, quien quedó imputado de femicidio. Testimonios y otras pruebas recolectadas lo señalan como presunto autor del crimen. En las próximas horas, el hombre quedará a disposición de Walter Guzmán, que instruye la causa.
Detienen a un camionero correntino de 22 años y lo acusan del femicidio de Sofía Bravo
Fue apresado ayer en la ciudad de General Lavalle, en la provincia norteña. Testimonios y otras pruebas lo señalan como sospechoso del crimen de la joven trans de 26 años, que era trabajadora sexual
Todo indica que Sofía Bravo, una joven trans que se encontraba en situación de prostitución, habría sido asesinada poco después de ser vista por última vez, el 5 de enero pasado. El cuerpo sin vida de la muchacha fue encontrado casi diez días después, a pocos metros del cruce de rutas 8 y 4, el último lugar donde estuvo antes de desaparecer.
Imputación por femicidio
Ante la gran repercusión que viene teniendo el caso en el país, el Ministerio Público Fiscal de Córdoba informó la detención por medio de un comunicado que se distribuyó entre los periodistas en horas del mediodía de ayer, aunque con mínimas precisiones al respecto.
Uno de los datos que se informaron oficialmente es que la acusación contra el joven correntino es de "homicidio calificado" por razones de género, lo que habitualmente se conoce como femicidio. Se trata de uno de los delitos más graves del Código Penal.
De todos modos, la comunidad LGBT intenta que el hecho sea recaratulado como “transfemicidio”, entre otras porque entienden que es un crimen de odio por pertenecer a una disidencia sexual.
Además, el Ministerio Público Fiscal indicó que las autoridades judiciales y policiales ya trabajan en el traslado del imputado a la sede de La Carlota.
Mientras completan los trámites previos al viaje, los pesquisas tratan de establecer si el joven, aprehendido con la colaboración de la Policía de Corrientes, tenía antecedentes penales.
Los investigadores creen que el ahora detenido, que trabaja como chofer de camión, levantó a Sofía Agustina Bravo (26) el 5 de enero cuando intentaba llegar hasta la casa de su mamá en Marcos Juárez, aunque la joven trans nunca llegó a destino.
En las últimas horas, trascendió también que el chofer se encontraba en la zona por razones de trabajo, y en tal sentido se indicó que se habría alojado en una localidad cercana a La Carlota.
Buscan la causa de muerte
En tanto, los voceros judiciales confirmaron que se trasladaron restos de la víctima a la ciudad de Córdoba, con el objetivo de "profundizar la autopsia" ya que no se pudo determinar la causa de su deceso.De todos modos, quedaron prácticamente descartados el suicidio, el accidente y la muerte natural. También se buscan rastros de ADN del agresor.
El hallazgo del cuerpo se produjo durante la tarde del sábado pasado, cuando personal de bomberos y de la policía cordobesa realizaban un rastrillaje sobre la ruta provincial 4, a unos cientos de metros de la rotonda de ingreso La Carlota.
Según aclararon las fuentes, los restos de la joven se encontraban en "avanzado estado de descomposición".
La búsqueda de Sofía había sido divulgada por el MPF cordobés, la organización Ni Una Menos y la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (Ammar).
Organizaciones sociales reclaman que el crimen de la joven sea caratulado como transfemicidio
Desde Diversidad La Carlota adelantaron que van a pedir que el asesinato de Sofía Bravo sea recaratulado como transfemicidio, atendiendo a que el homicida se aprovechó de su condición de mujer trans y trabajadora sexual para poder concretar el crimen.
Pablo Cavaignac, abogado e intengrante del colectivo, adelantó que "propugnarán la calificación legal del hecho como transfemicidio. Tratamos de acercar a un abogado para que represente a la familia como querella. O acercarnos nostros como amicus curiae, para proponer esta calificación”. En el mismo sentido, indicó que vienen trabajando junto al Inadi de Villa María para hacer una recomendación sobre esta calificación por transfemicidio.
"Que sea calificado como un femicidio ya es un logro, pero no podemos dejar de lado que invisibiliza la particularidad de la víctima, de haber sido una persona trans. Este es un hecho que se caracteriza por el aprovechamiento de las condiciones de vulnerabilidad de la víctima, de todas las vulnerabilidades estructurales que atravesaban a Sofía: el ser mujer, el ser trans, el ser trabajadora sexual", indicó Cavaignac.
En otro orden, el abogado recordó que junto a Sofía militaban por la aplicación del cupo laboral trans en La Carlota.
"Nosotros creemos que el autor se aprovechó de toda esa situación social que se veía reflejada en su vida, pero también en las cosas que faltaban de parte del Estado. Ella estaba militando el cupo laboral trans en La Carlota, que fue a través de un proyecto de ordenanza que se aprobó por unanimidad en 2022", indicó.
En el mismo sentido, destacó que el cupo laboral podría haber sido una herramienta que a Sofía le hubiese permitido dejar atrás la prostitución.
"En el caso de Sofía, hubiera significado un cambio de vida, porque iba a hacer que ella pudiera dejar su situación de prostitución, que había manifestado no querer continuar. Eso, además del acceso a la atención de salud, a un reconocimiento social. Esto no sucedió porque no se aplicó el cupo laboral trans", indicó.
Por último, sostuvo que el de Sofía Bravo "es un crimen de odio, con la acción dirgida a una víctima específica, con determinadas características. En este caso hay un ataque a toda las diversidades, porque Sofía fue víctima por sus características y podría haber sido cualquiera de nosotros".