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Tras las amenazas, el crimen de Paloma y Josué tiene nuevo fiscal

Hernán Bustos Rivas, que había comenzado con la investigación, pidió apartarse tras recibir intimidaciones por parte de uno de los abogados querellantes. Ahora, se hizo cargo de la causa Darío Provisionato

Darío Provisionato es el nuevo fiscal que quedó a cargo de la investigación por los crímenes de los adolescentes Paloma Gallardo y Josué Salvatierra en Florencio Varela.

La medida fue aprobada luego de que Hernán Bustos Rivas haya pedido dejar la causa por intimidaciones y amenazase de parte de Carlos Dieguez, abogado de la madre de Josué.

El fiscal Rivas, que investigó el caso desde el hallazgo de los cuerpos en un descampado, al pie del puente de Bosques, pidió abandonar la investigación tras diez días sin avances importantes para esclarecer el doble homicidio.

A través de un sorteo, se dejó constancia que Provisionato, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°1 de Berazategui, queda al mando de la investigación por los asesinatos de los jóvenes.

Conforme al documento que presentó el fiscal, uno de los requerimientos es porque dicho abogado "lo presionó para aceptar su hipótesis delictiva y amenazó con consecuencias laborales y exposición mediática".

Luego de evaluar el pedido, Villagra autorizó su desplazamiento y ayer se llevó a cabo el sorteo donde Provisionato quedó seleccionado como el nuevo fiscal.

Avances de la causa

El último movimiento en el expediente fue el informe complementario de la autopsia, que ratificó que Paloma Gallardo no fue abusada sexualmente, como afirman sus padres. Ambos sufrieron una doble fractura de cráneo.

Con el esclarecimiento del doble asesinato frenado, este miércoles se abrió una ramificación de la causa. La Policía Bonaerense detuvo a tres sospechosos, acusados de intentar organizar una toma de terrenos en el descampado que es la escena del crimen.

De acuerdo a la investigación, que hizo el área de Cibercrimen, el objetivo de los delincuentes era usurpar, lotear y vender el predio de diez hectáreas.

Según fuentes policiales, la organización de la toma se hizo a través de WhatsApp y grupos de Facebook.