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De Mendiguren: "Es asombroso que digan que el Gobierno no tiene rumbo"

El presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior indicó que la gestión de Fernández encaró el proceso de rescate del sector privado más importante de la historia. Remarcó la magnitud de la crisis en el mundo

José Ignacio de Mendiguren, presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (Bice), asegura que es asombroso que la oposición sostenga que el Gobierno no tiene rumbo. Precisa que la gestión de Alberto Fernández se ha dedicado a ejecutar el mayor rescate que se recuerde del sector privado y a sentar las bases para que, cuando la pandemia pase, el país tenga armas para iniciar la recuperación.

El titular del Bice participó ayer, junto con el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, del lanzamiento de dos líneas de crédito destinadas a la inversión productiva y a la financiación de exportaciones. Las dos tienen como destino las pymes.

De Mendiguren habló con Puntal, remarcó la magnitud que la crisis está teniendo en todo el mundo por la pandemia de coronavirus y señaló que la confianza volverá cuando se consolide la reactivación de la economía y se recupere el consumo.

Con respecto a las líneas de financiamiento que lanzó el Bice, declaró: “En un momento difícil, por lo menos mostramos un poco el camino que vemos. Porque todas las crisis, por duras que sean, pasan y lo importante es que de la crisis salgamos en la dirección correcta. Hablar ahora de la salida de la crisis suena como futurista, pero es la realidad. Es una crisis inédita, lo único que sabemos es eso: nadie sabe cuándo termina, cuándo llega la pospandemia o la posvacuna, uno está viendo cómo todo se replantea en Europa, Estados Unidos. Pero, bueno, nosotros tenemos que seguir además atendiendo el día a día marcando el rumbo.

- ¿Las líneas de financiamiento van en ese sentido; son una apuesta a las pymes y la internacionalización?

- La verdad que hemos tenido una crisis inédita. Uno comprende su magnitud al ver el impacto que tuvo en las economías más sólidas del mundo. Cuando vemos que hay caídas del producto de más del 20 por ciento en países como España, Francia, una fuerte caída en Alemania. Estados Unidos tuvo que incurrir en un déficit fiscal que, para el segundo semestre, está proyectado en un 23 por ciento. Cuando uno mira los déficits fiscales promedio del mundo, en lo que va del año estamos en un promedio del 14,3 por ciento. Es decir, un verdadero terremoto mundial. Y una crisis, la pandemia, que a diferencia de otras, nadie pudo prepararse porque en menos de dos meses ingresó en 160 países. Normalmente una pandemia tardaba meses o años en llegar a otros países. Hay que tener conciencia, para entender lo que nos pasa, de la mangitud de esto a nivel mundial. Cuando uno ve que mucha información está dirigida a plantear que, poco menos, somos el peor país del mundo, que la causa de esta crisis es por el mal manejo interno, uno tiene que entender que eso no es así y mirar que eso está pasando en todos los países desarrollados, que entraron a esta crisis pero con economías sólidas.

Diferencias

- Hay países que han tenido otras herramientas para enfrentar esta crisis. Argentina venía de tres años de recesión.

- Ellos entraron a la crisis con un auto en buenas condiciones, con buenas gomas, buenos frenos, un modelo 2019 y así y todo están sufriendo lo que están sufriendo. Nosotros entramos a la crisis con un Renault 4L, picado, fundido, con gomas lisas y sin frenos. Entonces, hoy tratar de comparar las dos performances de los países es absolutamente imposible. Entonces, lo único que puede hacer el Gobierno en situaciones tan complejas, que varían y que nadie puede predecir cuánto duran, es hacer un poco lo que está haciendo: tener claro el rumbo hacia dónde uno quiere salir después de la crisis y atendiendo el día a día a medida que se van expresando los problemas.

- Pero uno de los reproches de la oposición, precisamente, es que el rumbo del Gobierno no se ve claro.

- Eso a mí realmente me resulta asombroso de escuchar. Soy industrial, de una pyme textil y estuve en la dirigencia gremial empresaria los últimos 40 años y le puedo asegurar que no se conoce en la historia que me ha tocado vivir ningún ejemplo de un rescate de esta magnitud del sector público al sector privado. En un gobierno que no tenía capacidad para aplicar políticas públicas y todos creyendo que esto iba a durar 40 días, hubo que salir a rescatar a la salud, a las pymes, al crédito, a los monotributistas, a los autónomos, a 9 millones de personas que no tenían ningún otro ingreso. Nunca me animé ni siquiera a pensar que el Estado podía ayudar a pagar los sueldos de las pequeñas y medianas empresas, llegando a más de 360 mil empresas, aportando a los sueldos de más de 3.600.000 trabajadores. Además, a las pymes se destinaron 350.000 millones de pesos en créditos productivos, al 24 por ciento. Calcule, soy presidente del Bice (Banco de Inversion y Comercio Exterior). Cuando llegué, a principios de este año, en este banco las tasas de interés en dólares para las pymes estaban al 15 por ciento anual; la tasa en pesos promedio estaba entre el 80 y el 90 por ciento anual y eso que es un banco de inversión. Hoy estamos anunciando líneas para las pymes exportadoras, para prefinanciar exportaciones, en dólares al 4 por ciento anual. Y en pesos, con una línea de crédito que estamos sacando a 7 años, con hasta 2 años de gracia, a una tasa fija en pesos en los primeros dos años del 24 por ciento anual. Entonces, que alguien diga que ha vivido en Argentina y alguna vez ha visto una decisión política tan clara, tan marcada, tan activa para poder paliar semejante crisis, es absolutamente inexacto.

- ¿Por qué hay entonces tanto nerviosismo en el mercado cambiario, con el dólar tan arriba, con el Gobierno que toma medidas y que recibe una respuesta contraria a la que espera?

- Primero, porque no desconocemos la magnitud de la crisis. No decimos que todo está bien. Usted puede tomar todas estas medidas para evitar un daño mayor, para evitar que desaparezcan instrumentos productivos que van a ser claves para salir. Porque nada se puede construir sobre un cementerio de empresas. Ahora, la verdadera salida va a ser cuando se reactive la economía, vuelva el consumo, vuelva el crecimiento. Esa va a ser la solución de fondo. Y hoy la economía, aunque gradualmente por supuesto, desde el piso de la crisis del mes de abril empezó a registrar una clara recuperación. Nos gustaría que fuera mucho mayor y que fuera homogénea para todos los sectores. Nosotros llevamos un control del consumo de gas, de cantidad de personal que está registrado que hoy está en actividad y no lo estaba antes. Del piso tan terrible, que fue aquí y en el mundo el mes de abril, se está iniciando una recuperación. Y ahí es donde la gente va a volver a confiar.

- Se habla del éxodo de empresas. ¿Existe un proceso real de ese tipo?

- Siempre en Argentina ha habido traslado de empresas e incorporación de empresas. Recuerdo el gobierno de la Alianza, en el que estaban De la Rúa, Patricia Bullrich, Lombardi, mucha gente que hoy está en la oposición. y ahí sí el éxodo era terrible. En el fin de la convertibilidad también hubo muchas empresas que se fueron. Hoy creo que hay empresas que se van pero no es por esta situación, si no que ya venía. Calcule que en el final del gobierno anterior se caían entre 40 y 50 pymes por día. Sin embargo, la respuesta del gobierno era que no había otra alternativa, que ese era el camino y que había que profundizarlo. Hoy, por supuesto que la pandemia profundizó la crisis; la diferencia sustancial es que hay un gobierno que ha tomado la decisión contraria a la anterior. La decisión es sostener a las pymes. Ya lleva 7 puntos del Producto para auxiliar al aparato profuctivo.

- ¿Es imposible predecir cuánto tardará el país para recuperarse?

- Uno mira lo que está pasando en Europa. Hoy escuchaba un funcionario alemán diciendo que no pueden evaluar cuál va a ser la magnitud del rebrote de los casos y eso nos tiene confundidos a todos. Pero si Argentina mantiene este rumbo de generar medidas como las que hoy (por ayer) anunciamos, de apoyo a las pymes exportadoras, de financiamiento de largo plazo, entonces en la situación de pospandemia, el mundo va a encontrar una Argentina bien parada. Porque basamos nuestra economía en un sector como el agrario, el energético, el de las ciencias del conocimiento y, además, se agrega lo que esperamos consolidar: una banca de desarrollo, que el Presidente tiene toda la decisión política de fortalecer.