Según el proyecto de presupuesto, el año próximo el gobierno de Javier Milei prevé aumentar un 23 por ciento los recursos para educación: destinará 6,8 billones de pesos a precios de 2025. La cifra supondría, según un estudio de la organización Argentinos por la Educación, un crecimiento real de entre 4,4% y 8% con respecto a 2025. Sin embargo, en términos históricos, la inversión en educación seguirá en uno de los niveles más bajos de la última década.
De acuerdo con lo previsto en el proyecto de Presupuesto 2026, la función Educación y Cultura recibirá más recursos que en 2025, pero su participación en el Producto Bruto Interno sigue por debajo del 1%.
La inversión nacional en educación pasó de un máximo de 1,59% del PBI en 2015 a una reducción sostenida en los años siguientes: fue de 0,86 por ciento en 2024, y las estimaciones para 2025 (0,73 por ciento) y 2026 (0,75 por ciento) confirman la tendencia descendente. El proyecto oficial prevé derogar el artículo 9 de la Ley de Educación Nacional, que desde 2006 exige destinar al menos el 6% del PIB a educación (sumando los aportes de Nación y provincias). Esa meta se cumplió sólo en el año 2015.
La inversión nacional representa alrededor del 25% del presupuesto educativo público; el restante 75% corresponde a las provincias. A partir del análisis de la evolución de los salarios docentes que pagan las provincias, se estima que también su inversión ha bajado drásticamente en los últimos dos años. Esta estimación no puede confirmarse debido a la ausencia de datos públicos, pero indicaría que la baja no es sólo propiciada por el gobierno nacional sino también por los provinciales.
La evolución del gasto educativo nacional muestra una etapa de estabilidad entre 2013 y 2017, seguida de una caída sostenida desde 2018 hasta 2020, una recuperación parcial entre 2021 y 2023, y una nueva contracción en 2024 y 2025.
Santiago Bulat, economista y consultor, indica que es una “gran noticia que, tras el ajuste de shock inicial que se hizo en el gasto en general, empiece una etapa de priorizar los lugares en los cuales se pondrá el foco para volver a robustecer, pero siempre sigue siendo más importante el cómo que el cuánto. Los resultados en materia educativa vienen declinando hace años como lo muestran las Pruebas Aprender. El foco debe estar en articular Nación con Provincias, porque los problemas educativos empiezan desde la

