Internacionales | Lula | Juez | tribunal

Lava Jato: la Justicia anuló las condenas de corrupción contra Lula y podrá aspirar a la Presidencia en 2022

El fallo de un juez de la Corte se basó sobre cuestiones de jurisdicción y no sobre el proceder de Moro y los fiscales.

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva recuperó ayer sus derechos políticos y puede ser candidato en 2022, ya que el juez Edson Fachin, del Supremo Tribunal Federal, anuló todas sus condenas por corrupción, justo en el momento más álgido del escándalo de filtraciones que reveló un complot entre el exjuez Sérgio Moro y el grupo de fiscales de la operación Lava Jato en contra del líder opositor.

Es indudable que la anulación de dos condenas y otra tercera causa abierta beneficia a Lula, quien sólo el domingo fue confirmado como el favorito por una encuesta para las elecciones presidenciales del año próximo con una intención de voto del 50% frente a un 38% del presidente Jair Bolsonaro.

Sin embargo, la decisión del juez Fachin, un aliado de los fallos de Lava Jato hasta ahora, se basó sobre cuestiones de jurisdicción y no por los cuestionamientos sobre la parcialidad de los entonces fiscales y jueces contra el exmandatario. En otras palabras, pese al cimbronazo político, el magistrado salvó penalmente a Moro y al exjefe de Lava Jato, el fiscal Deltan Dallagno.

Contra el lawfare

"Siempre estuvimos del lado correcto, contra el lawfare. La decisión está en sintonía con todo lo que decimos desde hace cinco años. Pero la decisión no repara los daños irremediables causados por Moro y los fiscales al expresidente Lula, al sistema de justicia y al país", afirmó el abogado de Lula, Cristiano Zanin Martins.

"La decisión salva a Lula pero también a Moro y al resto del Lava Jato. Tener este desenlace confirma la frase de que Brasil no es para principiantes. Ahora jurídicamente, después de este fallo, no es relevante evaluar si Moro fue parcial o no", explicó, por otra parte, a Télam el abogado criminalista Luciano Quintanilha de Almeida, socio del estudio Vilardi Advogados.

En concreto, el juez Fachin hizo lugar a un habeas corpus que presentó el año pasado la defensa de Lula.

Consideró que las causas contra el expresidente no eran competencia de Lava Jato por cuestiones jurisdiccionales, ya que no existen vínculos entre el caso y la corrupción en Petrobras.

En conclusión, el juez de la Corte remitió las causas a Brasilia, donde el tribunal regional de la capital deberá decidir si la causa pasa a un juez de primera instancia y todo el proceso comienza de cero, lo que daría suficiente tiempo a Lula para presentar su candidatura presidencial el año próximo.

Lula pasó 580 días preso por una condena dictada por Moro en una celda en la ciudad de Curitiba, en el estado de Paraná, y quedó fuera de la elección de 2018, pese a ser el gran favorito en las encuestas.

Su lugar fue ocupado por Fernando Haddad, quien perdió el balotaje con Bolsonaro, el candidato que apoyó toda la derecha para evitar la vuelta del Partido de los Trabajadores, aun los sectores que hoy critican al ultraderechista por su gestión de la pandemia y la crisis económica.

Tras esa victoria electoral, Moro renunció a su cargo de juez y por 17 meses fue ministro de Justicia de Bolsonaro.

Hoy Moro vuelve a aparecer en las encuestas presidenciales. Por eso es relevante que la decisión del juez Fachin no se basa en las denuncias de Lula por un 'lawfare' atribuido a fiscales y jueces tanto de primera como de segunda instancia, sino por una cuestión de competencia jurisdiccional.

El juez supremo entendió que las acusaciones contra Lula no tienen vinculación con el Petrolao, los desvíos de Petrobras que sí juzga el Tribunal N° 13 de Curitiba, y, por eso, declaró la incompetencia de la Justicia Federal de Paraná, que dictó las condenas en tres causas contra el exmandatario.

"Esta decisión llega con cinco años de atraso. Moro nunca debió haber juzgado a Lula", afirmó la presidenta del Partido de los Trabajadores, Gleisi Hoffmann.

Los procesos serán ahora analizados por el Tribunal Federal de Brasilia, que se encargará de decir si los actos realizados en los tres procesos pueden o no ser validados y reutilizados.

Impacto en la economía

La decisión de Fachin tuvo un efecto inmediato no sólo en el mundo político, sino también en el económico.

De inmediato, aumentó la cotización del dólar y se profundizó la caída de la Bolsa en Brasil, en una clara señal de que el mercado financiero teme que Bolsonaro y su agenda liberal puedan perder el año próximo en las urnas.

Desde el Congreso, la reacción también fue inmediata.

El presidente de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, del Partido Progresista (PP), aliado de Bolsonaro , fustigó la decisión por no penalizar a Moro y dejó un guiño a Lula.

"Mi mayor duda es si la decisión monocrática fue para absolver a Lula o a Moro. Lula podría merecerlo; Moro jamás", dijo Lira.

Lula fue condenado a 8 años y 10 meses de prisión por presuntamente haber recibido un inmueble en la playa de Guarujá como soborno de la constructora OAS a cambio de favores políticos.

Esta condena había sido confirmada por la Cámara de Porto Alegre y estaba en apelación ante el Supremo Tribunal Federal, la corte constitucional.

Además, había sido condenado por la jueza sustituta de Moro, Gabriela Hardt, a 12 años y 11 meses de prisión por corrupción y lavado de dinero por reformas realizadas por las constructoras Odebrecht y OAS en una casaquinta en Atibaia, estado de San Pablo, propiedad de un amigo.