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Al final, los peces murieron por las altas temperaturas y el bajo caudal del río

El informe definitivo de la Policía Ambiental descartó de plano que la masiva mortandad se haya producido por los efluentes de la Planta Cloacal. El caso encendió luces de alerta desde el punto de vista ambientalista

Finalmente, la Policía Ambiental de la Provincia de Córdoba dio a conocer ayer el informe final de la mortandad de peces en el río Cuarto, en el que asegura que éstos no murieron en virtud de los desechos de la Planta Cloacal, sino por las altas temperaturas que había por esos días en el sector, como consecuencia de la ola de calor, y por el bajo caudal del curso de agua.

Lo confirmó a Puntal el jefe del Área Inspectores de la Policía Ambiental, Sebastián López.

“Después de las muestras obtenidas en el lugar y de los sondeos realizados, se llegó a la conclusión de que la mortandad de peces en el río Cuarto obedeció al bajo caudal y a las altas temperaturas, producto de la ola de calor”, sostuvo el funcionario provincial.

-¿Quedó descartada la hipótesis de los efluentes de la Planta Cloacal?

-Quedó totalmente descartada. Hemos tomado muestras aguas arriba y aguas abajo de la Planta Cloacal y se las cotejó con las de años anteriores dando resultados similares a los de esos años.

De esta forma, López remarcó que “la Planta Cloacal no está contaminando el río Cuarto”.

La aparición de miles de peces en el río Cuarto encendió luces de alarma entre pobladores de la zona, ambientalistas y políticos de la ciudad.

Como eso ocurrió en cercanías de la Planta Cloacal se pensó que el vertido de los efluentes era la causa de la masiva mortandad.

“Después de las muestras obtenidas en el lugar y de los sondeos realizados, se llegó a la conclusión de que la mortandad de peces en el río Cuarto obedeció al bajo caudal y a las altas temperaturas, producto de la ola de calor”, sostuvo la Policía Ambiental.

“Una madrugada llegué hasta acá y sentí un olor extraño y al día siguiente me encontré con todo este desastre”, contó un lugareño.

Y acotó sorprendido:“Había orillas blancas de peces. Nunca había visto algo así”.

En la ribera del río y muertos había sábalos, moncholos, bagres y doradillos.

Advertidos de este hallazgo, concejales de la oposición se acercaron al lugar para comprobar in situ lo que había pasado con miles de peces.

A partir de ahí se llevó a cabo el desembarco de la Policía Ambiental para tomar muestras e investigar las causas de estas muertes.

Por esos días, invadía gran parte del país una ola de calor que alcanzó también a Río Cuarto.

Al respecto, el informe de la Policía Ambiental determinó que las altas temperaturas y el bajo caudal del río fueron las causas determinantes de la mencionada mortandad de peces.

Y descartó de plano que los efluentes cloacales hayan sido la génesis de la masiva muerte de sábalos y bagres, entre otras especies que habitan el río.

Marcelo Irastorza. Redacción Puntal