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Investigan el accidente de un avión militar que le costó la vida al piloto

El Juzgado Federal ordenó un peritaje en el campo donde cayó la aeronave, en Villa Valeria. El cuerpo del joven capitán fue llevado a la morgue del Hospital para realizar la autopsia. Había logrado eyectarse, pero igual falleció

Un avión de guerra de la Fuerza Aérea se estrelló ayer en Villa Valeria tras haber despegado de Villa Reynolds, y como consecuencia del hecho falleció el piloto, pese a lograr eyectarse. El juez federal de Río Cuarto, Carlos Ochoa, que investiga el siniestro, dispuso el traslado del cuerpo a la morgue del Hospital San Antonio de Padua, y ordenó un peritaje con la colaboración de la Fuerza Aérea. El fallecido, Gonzalo Fabián Britos Venturini, de 34 años, tenía el rango de capitán y era oriundo de Paraná, Entre Ríos. Sin embargo, había completado su formación en Córdoba y cumplía funciones en la V Brigada Aérea, en la provincia de San Luis. Versiones extraoficiales indican que saltó del avión pero lo hizo a muy baja altura, por lo que, posteriormente, tuvo una corta sobrevida y finalmente murió.

La aeronave, un Lockheed Martin A-4AR Fightinghawk con registro C-925, había despegado de la V Brigada Aérea, ubicada en la localidad de Villa Reynolds, en el marco de vuelos de adiestramiento cotidianos y era piloteada por el capitán Gonzalo Britos Venturini.

A unos 50 kilómetros del lugar de origen, el avión sufrió un desperfecto y terminó estrellándose en un campo en la zona de la localidad de Villa Valeria: el piloto logró eyectarse, pero de todos modos falleció.

El accidente se registró a las 10.05 de ayer, cuando el avión se precipitó a tierra, ubicado a unos 10 kilómetros al norte de Villa Valeria, sobre un sector del establecimiento La Primavera.

Aunque en un primer momento se dijo que el piloto había salido con vida del siniestro, minutos más tarde, se confirmó su muerte.

"La Fuerza Aérea lamenta informar que tras la eyección efectuada esta mañana, el piloto de A4AR reportado fue hallado sin vida en las inmediaciones de la localidad de Villa Valeria. Aún se desconocen las causas del deceso del aviador militar".

Luego, en un comunicado, la Fuerza Aérea informó que eran dos los aviones que se encontraban realizando las tareas de adiestramiento; que el cuerpo del piloto fue encontrado por la V Brigada Aérea; y que ya se activaron los protocolos para realizar la investigación y establecer las causas del accidente.

El avión, denominado Halcón luchador, es un cazabombardero estadounidense que fue armado para la Fuerza Aérea Argentina en el año 1995. Pertenece a la V Brigada Aérea con asiento en Villa Reynolds (San Luis), desde donde se activó el plan de emergencias interno y donde dieron aviso al personal de Villa Mercedes, San Luis, para la emergencia.

La aeronave siniestrada ayer en el sur provincial tiene similares características a las que días atrás practicaban tareas de entrenamiento sobre la ciudad de Río Cuarto.

Uno de los últimos accidentes protagonizados por este mismo tipo de avión ocurrió el 29 de septiembre de 2015 en la V Brigada Aérea, en el mismo, la aeronave impactó contra un hangar y murió el suboficial principal Luis David Peñaloza y otros cinco militares resultaron heridos.

El mantenimiento, en Río Cuarto

Este diario pudo confirmar que el mantenimiento de las aeronaves como la que se accidentó en Villa Valeria se realiza en el Área de Material de Río Cuarto. Este trabajo implica, entre otras cosas, las inspecciones periódicas de los vehículos según las horas de vuelo que registran, y otras revisiones de mayor envergadura.

En lo que hace puntualmente al mecanismo de escape ante siniestros, fuentes consultadas por este diario señalaron que los asientos eyectables son revisados por una empresa privada, mientras que el Área de Material de Río Cuarto se encarga, en estos casos, de controles menores.

De todos modos, aclararon que el avión siniestrado pertenece a la V Brigada de la Fuerza Aérea, con asiento en Villa Reynolds. Además, indicaron que allí mismo se encargan de solucionar los problemas de mantenimiento más sencillos, hasta tanto se requiera una intervención de mayor envergadura.

A última hora de la tarde de ayer, personal de la Policía Federal realizaba el traslado del cuerpo sin vida del capitán, desde el campo donde ocurrió el accidente hasta el Nuevo Hospital San Antonio de Padua. Villa Valeria se encuentra a 210 kilómetros al suroeste de Río Cuarto, e implica una demora en tránsito de aproximadamente 3 horas. Se esperaba el arribo de los restos mortales promediando la noche de ayer, para practicarle la autopsia.

Después de que se hizo público el siniestro, cerca del mediodía, tomó conocimiento el Juzgado Federal de Río Cuarto, que tiene competencia en el caso, por tratarse de un accidente que involucra a una nave y un piloto de las Fuerzas Armadas, ocurrido dentro de su jurisdicción.

Lucía Storani, secretaria penal del Tribunal Federal de Río Cuarto, precisó que, rápidamente, se ordenaron medidas que hacen a la investigación del accidente aéreo y las circunstancias que rodean a la muerte del capitán Gustavo Britos. Sobre este punto, explicó que “interviene una junta de investigación de accidentes de aviación, especialmente conformada para el caso por las Fuerzas Armadas, que reportan al Juzgado Federal de Río Cuarto para avanzar con la investigación”.

Según se supo, esa junta ad hoc se encarga de la tarea de peritaje del siniestro, a instancias del tribunal federal de Río Cuarto. En tanto, la Policía Federal se ocupó de la preservación del escenario del hecho.

El piloto fallecido había alcanzado el rango de capitán, tenía 34 años de edad y era nativo de Paraná (Entre Ríos). Luego de sus estudios iniciales en II Brigada de la Fuerza Aérea Argentina, con asiento en la misma ciudad, continuó con su formación en Córdoba capital. En la actualidad, cumplía tareas de prueba que se coordinaban desde la base de Villa Reynolds (San Luis).

Según trascendió, Gonzalo Britos tuvo algunos minutos de sobrevida después del accidente, pero terminó falleciendo poco después en el lugar donde cayó.