Fue luego de los alegatos finales de las partes y las últimas palabras del acusado. Previo a la sentencia, los fiscales habían solicitado que sea declarado culpable. El pedido fue hecho por los funcionarios judiciales durante los alegatos que se desarrollaron ayer en el Tribunal Oral en lo Criminal número siete de San Isidro. Del Río, a su turno, dijo no haber participado del hecho: "Soy inocente, amo a mis padres".
La sentencia a cadena perpetua fue unánime, al ser encontrado culpable de doble homicidio agravado por el vínculo, por alevosía y por el uso de arma de fuego.
La decisión de los 12 integrantes del tribunal fue unánime y se resolvió en un tiempo muy acotado: se juntaron a deliberar pasadas las 19 luego de escuchar las instrucciones de la magistrada y antes de las 20 ya habían emitido su definición en la sala.
Lo hicieron tras escuchar los alegatos de la Fiscalía -compuesta por Alejandro Musso, Marcela Semeria y Gastón Larramendi-, el particular damnificado -Félix Linfante y Marcelo D’Angelo- y de la defensa, representada por los abogados Mónica Chirivín y Gastón Salamón.
Del Río no mostró ninguna emoción, aunque sí se puso colorado. Al finalizar la audiencia, se limitó a hacer una vista panorámica del salón, tal como lo había hecho el primer día del juicio.