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River le ratificó la confianza a Demichelis y Boca busca otro refuerzo para el plantel

El ex Bayern Múnich conducirá al equipo ante Sarmiento el próximo domingo. “Lo puedo dar vuelta”, aseguró durante el cónclave con Francescoli y Ponzio. En los Xeneizes, Giulano Galoppo puede sumarse al equipo.

El técnico de River Plate Martín Demichelis se marchó sin dar declaraciones luego de la derrota de River Plate 2-1 ante Godoy Cruz, en Mendoza.

El “Bodeguero” hasta el encuentro del miércoles por la noche ante el “Millonario” no había conseguido ganar en la Liga Profesional y los tres puntos que tenía en la tabla (por tres empates) se lo habían descontado por un fallo en el Tribunal de Disciplina.

Con apenas dos victorias en los últimos siete compromisos, y diez puntos en la tabla de posiciones -a cinco del líder Huracán-, los nubarrones se posaron sobre el ciclo del técnico, que ya ofreció tres vueltas olímpicas (una Liga, un Trofeo de Campeones y una Supercopa Argentina), aunque los simpatizantes de River lo cuestionan cada día más.

No obstante, los rumores de salida, el ex defensor de 43 años, se reunió en la tarde de ayer con Enzo Francescoli y Leonardo Ponzio, los dos hombres fuertes del fútbol del Millonario.

Y les reiteró lo mismo que le había dicho al plantel y a sus colaboradores en el vestuario del estadio Mundialista de Mendoza: que él cree que puede revertir el mal momento, que “lo da vuelta”.

Incluso, en el encuentro de ayer, el trío habló del presente del equipo, pero también del futuro y de los refuerzos que le pueden faltar a la plantilla, pensando en la doble competencia que incluye la Copa Libertadores, en la que el equipo se medirá ante Talleres de Córdoba por los octavos de final en el partido de ida el 14 de agosto en el Mario Alberto Kempes.

Así, el DT volverá a estar en el banco el domingo a las 18.30 en el Monumental ante Sarmiento de Junín, por la octava fecha del torneo de Primera División, en busca de la recuperación y del cambio de humor popular.

En la provincia cuyana hubo espacio para el público “neutral”, el cual fue mayormente ocupado por hinchas de la Banda que, al finalizar el partido, se acercaron al autobús del equipo para expresar su descontento.

También lo hicieron durante el encuentro, entonando el clásico “a ver si ponen huevos, que no juegan con nadie”, que suele aflorar en los malos trances de los equipos argentinos.

Por Boca, más refuerzos

En la vereda de enfrente, el Consejo de Fútbol de Boca ya gastó 11 millones de dólares para adquirir refuerzos para la Copa Sudamericana, su principal objetivo de este semestre, pero la Conmebol abonará solo 6 millones de la misma moneda para el equipo que gane el trofeo continental.

Boca fichó al defensor chileno Gary Medel, proveniente del Vasco da Gama de Brasil, y fue la única incorporación por la que no abonó nada por la transferencia.

Por el mediocampista Tomás Belmonte, el club presidido por Juan Román Riquelme pagó al Toluca de México 3 millones de dólares por el 50% del pase, mientras que a Newell´s Old Boys le abonó 5 millones de dólares por el 80% de la transferencia del delantero Brian Aguirre.

Por el centro delantero Milton Giménez, de 27 años, Boca le pagó a Banfield unos 3 millones de dólares.

Paradójicamente y por un error administrativo de Boca, ninguno de estos refuerzos pudo debutar aún en el certamen internacional.

Ahora, tras el pase a octavos de final, los ansiados refuerzos debutarán cuando Boca enfrente a Cruzeiro.

El partido de ida se jugará el 14 de agosto, en La Bombonera, y siete días después la revancha se disputará en el estadio Mineirão de Belo Horizonte. El ganador de esa llave deberá medirse con el triunfador de la serie entre los equipos paraguayos Libertad y Sportivo Ameliano.

Por llegar a los octavos de final, Boca percibirá un premio de 600.000 dólares y cobrará en los próximos días los 500.000 dólares ya ganados por eliminar en los playoffs a Independiente del Valle de Ecuador.

Con respecto a los refuerzos, el Consejo de Fútbol aún continúa las negociaciones por el mediocampista Giuliano Galoppo, de San Pablo, también pretendido por Rosario Central. Por el ex jugador de Banfield, surgido en las inferiores de Boca, el club paulista además de pretender cobrar 3 millones de dólares por el 50% del pase, quiere al mediocampista Pol Fernández, quién ya anunció su intención de irse del club cuando concluya su contrato a fin de año. Fuentes vinculadas a las partes en este pase revelaron que el contrato del jugador con Boca está "prácticamente acordado", pero debido a que Rosario Central ofreció a San Pablo 3,3 millones de dólares por Galoppo la negociación con Boca ingresó en un compás de espera.