“Realmente uno vuelve a creer que el Espíritu Santo obra y yo soy testigo de que es así”, agregó el arzobispo de Córdoba al aludir a la sorpresiva elección de Robert Prevost como Pontífice.
El cardenal cordobés, quien expresó “alegría y gratitud” por la elección de León XIV, ya dejó la habitación 502 de Santa Marta, donde estuvo alojado durante el cónclave.
Ymandó a renglón seguido “un saludo y un agradecimiento” a la feligresía católica.
El jueves pasado, “el cardenal estadounidense Robert Francis Prevost fue elegido como el nuevo Papa de la Iglesia Católica, adoptando el nombre de León XIV, convirtiéndose así en el primer pontífice de origen estadounidense pero también con nacionalidad peruana, reflejando de esta forma su profunda conexión con América Latina”.
Rossi fue uno de los cuatro cardenales argentinos que votaron en el cónclave para elegir al sucesor de Francisco, junto a Víctor Manuel “Tucho” Fernández, Vicente Bokalic y Mario Poli.
Jesuita como Jorge Bergoglio, el arzobispo cordobés expresó que el papa León XIV es “un hombre de mucha experiencia, de mucha bondad y de mucha claridad” y agregó que, en las votaciones del cónclave, “realmente uno vuelve a creer que el Espíritu Santo obra, soy testigo de que es así”.
-¿Cómo recibió la novedad?
-Tenemos nuevo Papa. Su santidad eligió el nombre de León XIV. Es Robert Prevost, agustino y misionero en Latinoamérica. Fue párroco, obispo y también jefe de los agustinos. Estamos muy contentos. Uno vuelve a creer que el Espíritu Santo obra. Tengo mucha alegría y un regocijo muy de Iglesia tanto adentro como cuando uno se asoma a la Plaza y ve esa locura. Quiero compartir esta alegría y ya iremos charlando de a poquito. Estamos todos muy bien.
Y, lejos de toda solemnidad y con tonada cordobesa, el cardenal lo definió como “un flor de Papa”.
La frase hizo recordar a cuando un periodista le preguntó si podría ser electo Papa y él respondió: “¿Papa yo? ¡Sí, papa frita!”.
Consultado sobre cómo fueron sus días en el Vaticano, Rossi respondió: “La oración de ustedes me ha sostenido y ha sostenido el cónclave. Seguramente gran parte del fruto en parte es la oración y el ofrecimiento de ustedes”.
Yexpresó, además, su deseo de “llegar a todos a través de los medios, pidiendo disculpas por estos días de descanso necesarios; prontó volveré a estar en suelo cordobés, como siempre, al servicio de su gente”.
Lejos de toda solemnidad y con tonada cordobesa, el cardenal lo definió como “un flor de Papa”. La frase hizo recordar a cuando dijo: “¿Papa yo? ¡Sí, papa frita!”.
En la previa al cónclave, Rossi salió al ruedo para defender el legado del papa Francisco frente a los ataques de los cardenales conservadores que denunciaban por los medios que el mandato de Bergoglio había generado confusión y que había que poner orden.
“Después de Francisco, habría que ser muy necio para dar marcha atrás”, expresó el cardenal de Córdoba.
Yacotó: “Espero que el sucesor del papa Francisco continúe con su legado”.
Ya con el Papa elegido, Rossi declaró: “Hace apenas tres horas que tenemos nuevo Papa, un hombre de mucha experiencia, de mucha bondad y de mucha claridad. Realmente, uno vuelve a creer que el Espíritu Santo obra. Soy testigo de que es así”.
El arzobispo aprovechó la ocasión para “pedir disculpas por el necesario descanso de estos días”, asegurando que “pronto volveré a estar en suelo cordobés, al servicio de mi gente” y despidiéndose “con cansancio y alegría, amor y gratitud”.
Como se sabe, Rossi nació en la ciudad de Córdoba, el 11 de agosto de 1958 y tiene 66 años; fue ordenado sacerdote el 12 de diciembre de 1986; elegido arzobispo de Córdoba el 6 de noviembre de 2021 por el papa Francisco;y creado cardenal en 2023. Además, es vicepresidente primero de la Conferencia Episcopal.
Por último, el arzobispo de Córdoba dio la bendición a todos los cordobeses: “Les doy la bendición a modo de agradecimiento por sus oraciones. Que el Señor los bendiga en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén”.