Ya completamente vestido de precandidato a presidente por Hacemos por Nuestro País, Juan Schiaretti presentó ayer sus principales propuestas de campaña en un encuentro con distintos medios gráficos de la provincia y acompañado por el ministro de Vinculación Comunitaria, Protocolo y Comunicación, Paulo Cassinerio, y el secretario de Comunicaciones de la Provincia, Marcos Bovo. Con críticas a las políticas económicas, se diferenció del actual gobierno y su precandidato a presidente Sergio Massa. Además, remarcó lo que viene anunciando desde que se lanzó a la carrera presidencial: la eliminación de las retenciones al agro.
Reducir en cuatro meses el 25% de los aportes que hace el campo a las exportaciones y el 100% en cuatro años fue una de las promesas de campaña más destacadas que pronunció el actual gobernador.
En este sentido, Schiaretti expresó: “Las retenciones son un impuesto que no existe en ningún lado, son un mal impuesto que penaliza la producción y no lo tienen Uruguay, ni Brasil, ni Paraguay, ni la Bolivia de Evo Morales, ni Chile" y agregó que "a un sector dinámico de la economía, el kirchnerismo le ha puesto un pie encima y lo trata como un enemigo con limitaciones para exportar y cepos permanentes".
Así, el precandidato cordobés aseguró estar convencido de que “hay que eliminar las retenciones a las exportaciones agropecuarias", que "la existencia de este impuesto tan injusto es parte de mirar al país desde el Amba” y que es una mirada “injusta” para el interior del país. Además enfatizó que “el que dice que no se pueden eliminar -las retenciones- en cuatro años miente". En este punto aseguró también contar con el apoyo de la Mesa de Enlace para una disminución gradual.
Diferencias con el kirchnerismo
Marcando una distancia absoluta, Schiaretti destacó siempre haberse “plantado” frente al espacio político conducido actualmente por Cristina Fernández de Kirchner y dijo que “el peronismo de Córdoba no tiene nada que ver con el kirchnerismo: el peronismo de Córdoba nunca pudo ser colonizado por el kirchnerismo. Nosotros somos un peronismo democrático, un peronismo federal, un peronismo progresista, un peronismo republicano. Somos el que respeta las instituciones, respeta la libertad de prensa, el que quiere producción y trabajo y no subsidios para Argentina y para nuestra Córdoba y somos un peronismo que defiende Córdoba y por lo tanto no tenemos nada que ver con el kirchnerismo”.
Esta diferenciación característica del discurso de Schiaretti tomó aún más protagonismo luego del lanzamiento de su campaña presidencial.
En otro tramo, el gobernador de Córdoba aseguró que “ser la antítesis del kirchnerismo es lo que hizo que los cordobeses después de 24 años nos siguieran apoyando con su voto”.
Además se diferenció de Massa (con quien había tenido un acercamiento luego de que este último se distanciara del espacio de Cristina Fernández de Kirchner en 2015) vaticinando que "este es el final de ciclo del kirchnerismo y la cara visible del fracaso de este gobierno es su candidato a presidente: el ministro Massa, que ha fracasado como ministro de Economía porque en un año tendría que haber mejorado el funcionamiento de la economía pero en ese período la inflación pasó del 65% al 130% y el dólar que estaba a $240 pasó a $540".
Cristina también es “pituquita”
Consultado por las recientes declaraciones del gobernador electo, Martín Llaryora, en las que denunció un centralismo porteño a la hora de gobernar, Schiaretti aclaró: “Él -por Llaryora- dijo que en los pituquitos de Recoleta la incluía a Cristina Kirchner, que vive ahí”.
El mandatario fue contundente con la manera que tienen de gobernar los dirigentes nacionales y criticó “la manera unitaria con la que funciona Argentina”.
A su vez, atribuyó este fenómeno en gran parte al funcionamiento de los medios de comunicación: “Estos canales del Amba tienen llegada nacional y en Córdoba. Lo que no significa que la gente elija a alguien del interior que aparezca en los medios del Amba. Por ejemplo, los dos dirigentes cordobeses que más aparecen en los medios del Amba son Juez y De Loredo y no ganaron, pero es indudable que en el orden nacional, para tener un conocimiento nacional, hay que estar en esos medios”.
Participación en las elecciones
El precandidato a Presidente atribuyó la caída en la participación electoral a que los votantes están "hartos de los políticos porque cultivan la grieta, que es el negocio de ellos y la desgracia de la gente".
Además, y si bien no lo constituyó como su principal adversario y apenas lo mencionó una vez, Schiaretti aseguró que por este efecto de la "antipolítica" crecen figuras como las de Milei, de quien aseguró que sus propuestas "no tuvieron éxito en ninguna parte del mundo".
Qué pasa si hay balotaje
Lo primero que aclaró el mandatario cordobés es que la aspiración está puesta en que su espacio sea el que dispute una segunda vuelta si la hay, pero que si eso no sucede la intención es "hacer un acuerdo para que haya un gobierno de unidad nacional" con un espacio que represente intereses similares a los de Hacemos.
Sobre la posibilidad de acordar con otros espacios y puntualmente con el sector de Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, si bien tomó distancia asegurando que el planteo de la precandidata sobre un posible blindaje del fondo “es irreal” y que a la divisa extranjera hay que conseguirla mediante exportaciones, Schiaretti no descartó nada: “De las grandes crisis se sale mediante acuerdos y la prueba evidente es cómo se salió del estallido de la convertibilidad”.
Además profundizó: “Ahora estamos en una situación que exige que haya un gobierno de unidad nacional. Esto es algo que hablaremos después del 22 de octubre porque hasta ahí todos competimos como candidatos. Después de eso, estamos dispuestos, con aquellos que coincidan con nuestra mirada a formar un gobierno que sea de unidad nacional. El candidato de las otras fuerzas no lo definiremos nosotros, lo define la gente en las Paso pero en la medida que esté de acuerdo con esto que nosotros planteamos, sea quien sea el candidato nosotros tenemos la predisposición de dialogar”.
“Más afinidad con el radicalismo”
En este punto, el precandidato cordobés destacó: “Si me preguntan con quién tengo más afinidad de pensamiento, no hay duda que es con el radicalismo en su conjunto, porque se expresa en el orden nacional parecido a lo que planteamos nosotros. Cuando me preguntan sobre economía yo digo un lema que no es mío, sino que lo dijo Willy Brandt -ex canciller alemán-: tiene que haber tanto mercado como sea posible y tanto Estado como sea necesario. También tenemos afinidad con sectores del Pro, con sectores de la coalición cívica y con infinitos sectores que expresan el peronismo no kirchnerista pero cada uno decidirá en qué lado juega”.
Acuerdo con el FMI
El eje estuvo puesto en las posibilidades de Argentina para solventar esa deuda: “Con el FMI hay que encarar la negociación diciendo que vamos a pagar cuando crezcamos pero Argentina tiene que equilibrar su macroeconomía y cambiar las reglas de juego que ahogan las posibilidades productivas y lo único que fomentan es la cultura del subsidio, independientemente del FMI” y agregó que “la negociación con el fondo y cualquier otro acreedor está vinculada a la capacidad de pago que tenemos. Es evidente que el FMI tiene una actitud laxa con Argentina pero como los kirchneristas tienen siempre doble discurso, por un lado patalean contra el FMI y por el otro van corriendo a intentar a arreglar, esta es una característica del kirchnerismo, que es un modelo feudal y autocrático”.
“Hay que cambiar la mirada centralista que tienen del país”
Schiaretti habló también de temas económicos de actualidad y no evitó referirse a los subsidios al transporte, la deuda de Córdoba, el superávit y la inversión.
En tal sentido, Schiaretti señaló: “Hicimos en 7 años el mayor plan de obra pública de la historia de la provincia (8.100 millones de dólares) y lo pudimos hacer porque tenemos superávit fiscal. Cuando yo digo que Argentina tiene que alcanzar el equilibrio fiscal, es porque esto permite funcionar con normalidad y lo que permite planificar”, recapituló el mandatario.
Además, en oportunidad de destacar uno de los principales ejes de gestión, agregó: “El 83% de esta inversión fue con recursos propios, tomamos créditos porque la manera de poder hacer inversiones es con financiamiento a largo plazo. Lo que hizo Córdoba es tomar esa pequeña parte, 17% de inversión, en deuda a largo plazo y a tasa razonable y en Argentina lo único que hay a largo plazo son los créditos externos. Este año la deuda de Córdoba va a tener un saldo menor a 2.300 millones de dólares -porque los únicos créditos a tasa baja que hay son en dólares-, esto representa cuatro meses de ingresos y 5 puntos del Producto Geográfico Bruto de la Provincia de Córdoba. No representa un riesgo para Córdoba”.
Subsidios al transporte
Este fue otro de los puntos centrales en los que Schiaretti aprovechó para diferenciarse de los dirigentes nacionales y sobre todo del actual gobierno: “Siempre desde el interior planteamos la injusticia del subsidio al transporte y cuando nosotros desde Córdoba reclamamos el centralismo que hay, no es que les echemos la culpa a los habitantes de la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores, sino que hablamos de los que gobiernan nacionalmente porque miran el país desde el Amba y para el Amba y así como están mal distribuidos los subsidios del transporte que se quedan el 85% en el Amba y 15% en el interior -que por eso tenemos el boleto más caro- también pasa con la luz, el agua y el gas. Esa mirada centralista que se tiene del país es la que hay que cambiar, por eso planteamos que necesitamos un presidente que sea del interior y que mire todo el país en su conjunto”.
Inflación y déficit
Si bien el precandidato de Hacemos repitió que “no hay fórmulas milagreras”, tampoco escatimó en manifestar con seguridad que “no hay dudas de que la inflación tiene solución: yo quiero la inflación que tienen nuestros vecinos, menor al 10% anual. Hay un error en la conducción de Argentina que es gastar siempre más de lo que ingresa. Acabar con esto tiene que ser el pivote central del plan de estabilización macroeconómica. Junto con esto hay que conseguir el equilibrio de las otras variables que conforman la macroeconomía argentina. Esto va a hacer duradero el que tengamos baja inflación”. Sobre esto, el mandatario aclaró que “esto no significa que haya que hacer un ajuste salvaje pero hay que acabar con el déficit fiscal, tener los equilibrios macroeconómicos y sostenerlos en el tiempo”.
Según el precandidato de Hacemos, para controlar el déficit fiscal se necesita: evitar la superposición de funciones entre Estado nacional, provincial y municipal; revisar los subsidios "mal dados", por ejemplo a la energía o al transporte, entendiendo quiénes necesitan acceder a los mismos y quiénes no; prestar atención al déficit de las empresas públicas (En Córdoba Epec y el Banco de Córdoba dan utilidades y pagan impuesto a las Ganancias). Además y con respecto al sistema previsional, el mandatario explicó que si bien no se puede descuidar a los trabajadores que llegan a la edad jubilatoria sin aportes por haber formado parte del sistema informal, "la peor solución es la que tomó el kirchnerismo de dar moratorias a mansalva con lo cual lo único que consiguió es que todas las jubilaciones estén bajas" y amplió que para esto hay que garantizar que a futuro haya un ingreso que esté predeterminado en el caso de las personas que llegan a la tercera edad sin haber podido aportar de manera total o parcial.
Ambiente y bioetanol
En este punto, Schiaretti hizo hincapié en: la economía circular, la reducción de la huella de carbono y la generación de energías alternativas como el bioetanol -sector en el que Córdoba se posiciona como una de las principales productoras-.
Atentado a CFK
“Fue un hecho terrible que tiene que ser investigado a fondo por la Justicia como corresponde. Opinar influye en la grieta y no va a ayudar a esclarecer el atentado”, pronunció el gobernador.