Acompañado por representantes de diferentes religiones durante el tedeum por el 25 de Mayo, el cardenal Mario Poli recordó también a los próceres de la Revolución de Mayo al manifestar que "aquellos hombres y mujeres de esa gesta trascendente que, aun en un tiempo difícil y de panorama internacional incierto, no dudaron en llevar hasta las últimas consecuencias los principios revolucionarios".
Participaron de la ceremonia el monseñor Joaquín Mariano Secunza y monseñor Enrique Eguía Seguí, obispos auxiliares de Buenos Aires; monseñor Joseph Bosch de la Iglesia Ortodoxa de Constantinopla; la rabina Silvina Chemem; la pastora Wilma Rommel; y el sheij Abdel Nabi Alhifnawi.