Inés y Andrés, además de ser emprendedores natos, tenían un sueño… pero los sueños, ¿Sueños son? No, los sueños se pueden convertir en pura realidad, y estos dos inquietos emprendedores lo hicieron posible. En 2019, se sumaron Fernando y Javier Amuchástegui y Bruno Zanuttin, tres “birreros” de personalidades únicas y complementarias.
Con un equipo mucho más amplio y un proyecto más fortalecido, en 2020, la cervecería pasó de producir 1.000 litros en equipos caseros a operar con tecnología avanzada proveniente de Alemania, China, Italia y Estados Unidos. Esto llevó a la construcción de una fábrica de 800 metros cuadrados en Montecristo, Córdoba. Al año siguiente, con la planta ya operativa, Träumer Bier comenzó a establecer su presencia comercial. “Construimos una fábrica de 800 m² en Montecristo, Córdoba, automatizada y de calidad mundial. En 2021, con la fábrica ya funcionando y productos estables según las calidades que deseábamos, comenzamos a transitar el camino de empezar una empresa de cero y todo su desafío comercia”, comenta Amuchastegui, quien agregó que “la empresa se centró en la eficiencia y la sustentabilidad desde el inicio, certificando normas internacionales HACCP de calidad e inocuidad alimentaria”. Esta certificación, facilitó procedimientos ordenados y una trazabilidad fiable. "Nos concebimos no sólo como una empresa cervecera artesanal, sino como una empresa integral de bebidas alcohólicas y no alcohólicas y fermentos en general", agrega.
Actualmente, Träumer Bier cuenta con nueve empleados y produce entre 15.000 y 25.000 litros mensuales de diversas bebidas, incluyendo cervezas de marcas propias y de terceros. Su oferta incluye la marca premium Träumer Bier, el vermut a base de cerveza (Beermut), Kombucha (Vitea) y próximamente coctelería en lata (Mixology). “Todos nuestros productos están concebidos con la idea de tener mucho carácter de aroma y sabores marcados, en los que se les agrega mucha materia prima de buena calidad para lograr estas características. Dentro de la marca Träumer Bier, tenemos 10 estilos de cerveza que van desde cervezas livianas con menos alcohol hasta cervezas más intensas y más alcohólicas, cubriendo una gran paleta de paladares exigentes. Entre ellas están Trigo con aportes de naranja, Golden con toques de miel, Amber caramelo, las lupuladas IPA y APA, nuestra Porter negra ahumada, Tripel estilo belga con harina de algarroba y tres estilos sesión más livianos: Blonde, Red y Hoppy”, explica Inés.
La competencia con grandes multinacionales fue y es un desafío debido a las diferencias de escala y presupuesto. Además, estas empresas cuentan con departamentos de marketing y branding gigantes. Sin embargo, Träumer Bier intenta hacerles frente enfocando sus estrategias en atraer y fidelizar a sus consumidores a través de la innovación. “En cuanto a la competencia con las grandes marcas, es importante ya que grandes multinacionales productoras de cervezas de alto consumo masivo han agregado a su cartera cervezas de estilos simulando la propuesta de marcas premium artesanales similares a la nuestra. La diferencia es que al manejar otra escala de producción, tienen otros costos muy diferentes a los nuestros que se trasladan al precio en góndola. Como resultado, gran parte de los consumidores eligen marcas que ven en múltiples espacios, y no eligen por el tipo de producto dentro de la lata. Esta situación lleva un inmenso esfuerzo en pensar constantemente estrategias innovadoras y disruptivas para llegar a los nichos específicos, ser más atractivos para ellos y fidelizar a nuestros consumidores”.
Además, la cervecería fomenta la innovación abierta y colabora con empresas e instituciones locales para contribuir al crecimiento económico regional. “Creemos que nuestra contribución al ecosistema de Córdoba viene de la mano de la innovación ya que al vincularnos con empresas e instituciones locales fomentamos que haya un crecimiento de economía regional al valorar conocimientos y productos locales. Las puertas de fábrica están siempre abiertas para recibir propuestas e ideas de otros emprendedores para en conjunto llevarlos a productos al mercado. Si bien las condiciones macroeconómicas no son siempre favorables para emprender, estamos convencidos que una de las herramientas y estrategias para amortiguar estos efectos negativos es a través de la innovación abierta, donde el conocimiento y acciones colectivas nos abren caminos puertas que de otra forma no se generarían”, señala Amuchastegui.
Con su presencia centralizada en Córdoba, Träumer Bier comenzó a expandirse a otras provincias y países limítrofes. La internacionalización es una prioridad diaria, y la empresa participa en ferias y viajes para fortalecer su presencia exterior. El futuro de incluye la ampliación de su cartera de productos, con planes para producir bebidas sin alcohol, vinagres, energizantes y suplementos dietarios, entre otros.
Sin dudas, Traümer seguirá dando que hablar en el mercado de las cervezas artesanales por la pasión inquebrantable que le ponen sus fundadores. Es solo cuestión de tiempo para que los expertos cerveceros del mundo, descubran que los sueños fermentados en Argentina tienen el potencial de rivalizar con los suyos.
