Las pymes aceiteras desperdigadas por la Pampa Húmeda le reclaman al gobierno nacional una rebaja de la presión impositiva y un recorte de las retenciones para facilitar las exportaciones del excedente que producen.
Las pymes aceiteras piden rebaja impositiva y recorte de retenciones
Con una serie de incentivos que reclaman, aseguran que podrían sumar 1.250 puestos de trabajo en un año y exportar 800 mil toneladas anuales de expeller, recuperando 25% la capacidad instalada.
Hay un diagnóstico que realizan desde el sector que las ubica en una encrucijada: un mercado interno que tracciona poco y exportaciones vedadas por los altos aranceles. La conclusión es que muchas pequeñas aceiteras están trabajando con alta capacidad ociosa y hasta aseguran que algunas debieron cerrar sus puertas.
Existen hoy en Argentina unas 400 empresas agroindustriales que agregan valor en origen mediante extrusión y prensado de soja, para producir aceite y expeller. “Somos pymes radicadas en su gran mayoría a más de 400 kilómetros de los puertos, que procesamos de 25 a 200 toneladas diarias. En conjunto generamos unos 2.800 puestos de trabajo directos en pequeñas localidades del interior”, explicó ayer Gustavo Perlo, titular de la empresa Alimentos Santa Rosa (ASR).
El empresario riocuartense destacó que son una alternativa para la producción de pequeños agricultores del interior: “Dinamizamos las economías locales y, al facilitar el acceso a la proteína vegetal a los establecimientos ganaderos alejados de los puertos, hemos contribuido al crecimiento de la productividad pecuaria de tambos, feedlot, porcina y avícola”.
Las empresas piden por eso una “reducción significativa de las retenciones al expeller de soja y que se lo coloque al mismo nivel que el biodiésel”, que actualmente tiene apenas un 0,13%. Y además, que se elimine el valor FOB oficial del expeller.
Por último, las pequeñas aceiteras aseguran que con las medidas de estímulo que proponen para el sector se podrían exportar 800 mil toneladas de anuales de expeller, recuperando un 25 por ciento la capacidad productiva instalada.
Existen hoy en Argentina unas 400 empresas agroindustriales que agregan valor en origen mediante extrusión y prensado de soja, para producir aceite y expeller. “Somos pymes radicadas en su gran mayoría a más de 400 kilómetros de los puertos, que procesamos de 25 a 200 toneladas diarias. En conjunto generamos unos 2.800 puestos de trabajo directos en pequeñas localidades del interior”, explicó ayer Gustavo Perlo, titular de la empresa Alimentos Santa Rosa (ASR).
El empresario riocuartense destacó que son una alternativa para la producción de pequeños agricultores del interior: “Dinamizamos las economías locales y, al facilitar el acceso a la proteína vegetal a los establecimientos ganaderos alejados de los puertos, hemos contribuido al crecimiento de la productividad pecuaria de tambos, feedlot, porcina y avícola”.
Las empresas piden por eso una “reducción significativa de las retenciones al expeller de soja y que se lo coloque al mismo nivel que el biodiésel”, que actualmente tiene apenas un 0,13%. Y además, que se elimine el valor FOB oficial del expeller.
Por último, las pequeñas aceiteras aseguran que con las medidas de estímulo que proponen para el sector se podrían exportar 800 mil toneladas de anuales de expeller, recuperando un 25 por ciento la capacidad productiva instalada.