El presidente Alberto Fernández y su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, adelantaron ayer que avanzan en la creación de una "moneda sudamericana común" en el marco de la "alianza bilateral" entre ambos países; reivindicaron "la paz y la democracia" y condenaron a todas las formas de "extremismo antidemocrático" y de "violencia política" en la región.
Los mandatarios publicaron el texto en el dominical Perfil como antesala de la agenda que compartieron hoy en la reunión que mantuvieron como parte de la visita de Da Silva al país por la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
En el mensaje, que escribieron conjuntamente, indicaron que decidieron "avanzar en las discusiones sobre una moneda sudamericana común que pueda usarse tanto para los flujos financieros como comerciales, reduciendo los costos operativos y nuestra vulnerabilidad externa".
En esa línea, instaron a "simplificar y modernizar las reglas y fomentar el uso de las monedas locales" para, así, "superar las barreras" en los intercambios.
Los mandatarios, a la vez, consideraron que la relación "fluida y dinámica" entre Brasil y Argentina "es fundamental para el avance de la integración regional".
"Queremos que el Mercosur constituya una plataforma para nuestra integración efectiva al mundo, a través de la negociación conjunta de acuerdos comerciales equilibrados que respondan a nuestros objetivos estratégicos de desarrollo", señalaron.
Las declaraciones de Massa
El ministro de Economía, Sergio Massa afirmó hoy que "la decisión de ambos gobiernos (de Argentina y Brasil) es empezar a trabajar para lograr una moneda común de ambos países y con invitación a otros países de la región, para encontrar un instrumento económico y comercial que habilite a profundizar el sistema de comercio entre ambos países y dentro de la región y el Mercosur".
Massa habló durante un acto encuentro empresarial realizado en la Casa Rosada, en el marco de la visita que realiza a la Argentina, el presidente del Brasil, Luiz Inacio Da Silva, y sostuvo que "ese instrumento debe tener el reflejo del PBI de cada uno de los países, en términos de participación, que tenga el reflejo de cada una de las monedas de los países y que no significa resignar las monedas de cada uno de los países, sino encontrar un elemento denominador común comercial que refleje la potencia del producto bruto de la región".
El jefe del Palacio de Hacienda puntualizó que "esta es una región que en el último año ha exportado más de 600.000 millones de dólares que ha tenido resultado positivo por más de 80.000 millones de dólares, y eso reflejado en un instrumento monetario de comercio nos puede dar la libertad a nuestras empresas en términos de comercio bilateral y fortaleza a la hora de negociar con otros bloques económicos".
También el ministro señaló que "el tercer desafío que recorremos es el de la integración energética. Nuestra región, Argentina y Brasil, hoy encuentran un límite al crecimiento industrial y al abastecimiento de nuestras poblaciones producto del declino que viene sufriendo la cuenca de Bolivia. Entendemos que infraestructuras regionales para el desarrollo apalancadas por el BID, la CAF, como es el caso de la obra del Gasoducto, pero también apalancadas por acuerdos bilaterales, tienen la centralidad de permitirnos procesos o proyectos que tengan ganancia para ambos países".
Massa añadió que "el desafío es recorrer juntos para que Vaca Muerta llegue a Brasil y que los brasileños puedan acceder al volumen de gas que necesitan para el proceso de desarrollo industrial y para que los argentinos podamos tener la oportunidad de poder exportar parte de lo que es nuestro recurso, nuestra riqueza del subsuelo que hoy se encuentra inexplotado o sub- explotado por falta de infraestructura".
El ministro detalló que "esa integración energética necesita de la combinación de recursos. Contamos con la decisión del gobierno de Brasil de buscar a través del BNDES financiamiento y mecanismos de financiamiento para aquellos insumos de empresas brasileras que son parte de la obra del gasoducto".
En otro orden, el ministro presentó un nuevo esquema de garantías para "la comunidad de negocios brasileña que tiene a la Argentina como mercado, que tiene empresas argentinas como parte de su cadena de valor y para la comunidad Argentina de negocios que tiene parte de sus suministros y sus bienes intermedios en el proceso de producción calzados con productos brasileros".
Massa remarcó que "hemos decidido avanzar en un acuerdo entre el Banco do Brasil y el Banco Nación con un esquema de garantías; el monto lo va a anunciar el ministro de Hacienda de Brasil que nos va a permitir acelerar el proceso de abastecimiento y exportación de empresas de Brasil a la Argentina y de suministro de empresas argentinas con empresas brasileras".
El ministro enfatizó que "esto tiene, por un lado, la eliminación de la incertidumbre que para muchos se genera producto de la restricción que Argentina tiene en el régimen de aprobaciones temporales o administrados de comercio exterior porque elimina esa incertidumbre para todo lo que es bienes y productos brasileros por un régimen propio financiado desde el Banco do Brasil con el Banco de la Nación Argentina".