Lunes 21.- Burlas y memes por el discurso presidencial del Día de la Bandera .- Es triste, no gracioso, lo de esta gente que no aprecia la fortuna de tener un presidente que, al tiempo que lidia con los desafíos de la coyuntura con la sobriedad y la elegancia de un estadista nato, se da tiempo para reflexionar con singular agudeza y sensibilidad sobre las complejidades del ser nacional. Como para subrayar que la semana anterior, al confrontar la naturaleza blanca y europea de los argentinos con la indianidad selvática y salvaje del resto de Latinoamérica no estaba siendo racista ni ofendiendo a nadie, destacó esta vez que acá también tenemos “descendientes que se convirtieron en afroamericanos”, innovador concepto antropológico que hasta donde sabemos elucubró él solito, sin necesidad de combinar sus lecturas de premios nobeles regionales con atentas escuchas de la obra de próceres del rock nacional. Fue el punto cúlmine de una pieza oratoria concebida para hacer eje en avisarles a los niños que “no se dejen dividir”, lo que en los términos de la política de hoy se traduce en no permitir que el noble objetivo de unir a todos los argentinos, con el que tan comprometido está Alberto, se vea obstaculizado por la mitad de los argentinos que en lugar de unirse destila odio, vuelve de las cenizas abusando de la tragedia, rinde culto al egoísmo o a la irresponsabilidad, pide la segunda dosis de veneno y hace lobby para la enfermedad y la muerte; y no sólo no quiere sumarse a nuestro llamado a la unidad sino que responde a nuestras manos tendidas, nuestros incondicionales actos de amor y nuestra gesta reconciliadora con memes y burlas que distorsionan el sentido de nuestras palabras.
Martes 22.- “Me apena ver a la oposición peleándose por cargos”.- Y sí, por más que digan que está todo bien, que es natural que los políticos se disputen espacios de poder, a un alma sensible como la de Sergio Massa le duele un montón ver esos trapicheos inescrupulosos que constituyen la parte menos noble del servicio público. Algunos están más o menos acostumbrados, claro, pero a aquellos que, como él, cuando se meten en el barro de la política siempre lo hacen para convertirlo en agua clara y transparente, y nunca para chapotear de tal forma de dejar enchastrados a todos los espectadores, les cuesta un montón tolerar el deprimente espectáculo de esos oportunistas que saltan de un lado a otro para ver dónde se pueden acomodar mejor, que prometen solemnemente nunca hacer lo que a la primera de cambio hacen con más entusiasmo que nunca, los que venden su alma inmortal a cambio de un puesto importante como presidente de una cámara legislativa, por dar un ejemplo cualquiera sin aludir a situación personal alguna. Tu pena es nuestra pena, Sergio, lloremos juntos y pidámosle a Dios que en su infinita misericordia perdone a aquellos que no comparten con vos los principios rectores de una línea de conducta que no por causalidad te puso donde te puso para hacer lo que estás haciendo.
Miércoles 23.- Gracias al “estímulo educativo”, Schiavi pudo anticipar medio año su libertad condicional.- Mirá vos, nosotros en su momento nos habíamos rendido de admiración ante el talento académico de Amado Boudou al tomar conocimiento de su graduación en instalaciones eléctricas y organización de eventos durante su duro cautiverio y ahora nos enteramos de que, al lado de quien estaba a cargo de la Secretaría de Transporte cuando un maquinista imprudente se llevó puestos el andén de Once y la brillante política ferroviaria de Cristina y De Vido, es apenas un advenedizo en esto de aprovechar el tiempo para prepararse para la vuelta. Más de sesenta cursos hizo Juan Pablo como para demostrar que el “volvimos mejores” no es un mero eslogan de campaña. Nos alegra saber que no va a tener problemas en la reinserción laboral: si no hay demanda para ejecutantes de ukelele, puede ponerse a construir azudes o termotanques solares sustentables. Si cuando sale -calculan para noviembre, maso- todavía está jodiendo el coronavirus, tampoco hay problema, una docena de los cursos son de protocolos de prevención, así que si tiene que atender una hamburguesería, entrenar a un equipo de básquet, pasar el revoque fino o cuidar niños, niñas y/o adultos mayores, sabe cómo hacerlo sin contagiarse. Si no puede dedicarse a la agricultura familiar, a la jardinería vertical, los cultivos hidropónicos y la elaboración de aromas caseros. Y también hizo unos cuantos cursos de formación docente, lo que le va a venir bárbaro para cuando lo llamen desde la UBApara dictar un seminario sobre lawfare, para lo cual está tan calificado como el mismísimo Amado, y acaso otro en la Facultad de Ingeniería sobre resistencia de materiales vencidos, dinámica de los cuerpos en espacios cerrados sometidos a desaceleraciones bruscas y matemática aplicada al conteo de cadáveres. Solamente faltó un curso de magia, suponemos que ni falta que hacía, en todo caso, para qué aprender a hacer desaparecer con una galera o un pañuelo lo que ya se ha hecho esfumar en bolsos de rápida circulación. Respecto de lo cual, por las dudas, también está en la lista un curso de delivery.
Jueves 24.- Felipe Solá explicó la posición argentina respecto de Nicaragua:“Hay una sola línea”.- En la Cancillería también saben de sobra lo que es hacer magia. El primer pase es mandarle una carta al gobierno sandinista para avisarle que si no dejan a algún candidato opositor fuera de la cárcel esa gente fastidiosa que se la pasa buscándole el pelo al huevo (¡si los conoceremos nosotros!) va a andar poniendo en duda la legitimidad de nuestra arrolladora victoria electoral. De inmediato, sin dejar que se les pase el enojo, en la OEAnuestro voto es que no tenemos por qué decirles a los nicaragüenses lo que tienen que hacer, con lo que también hacemos enojar a Washington y a otros cuya opinión nos importa todavía menos que cómo se vota en Nicaragua. Coherentemente, en la ONUdecimos más o menos lo mismo que en la OEA, pero entre una y otra contndente toma de posición llamamos a nuestro embajador en Managua para manifestar nuestro malestar por cómo hacen esas elecciones en las que no nos metemos porque nunca nos metimos ni nos volveremos a meter. Y todo en menos de dos semanas. Como se ve, hay una sola línea y consiste en lograr que de derecha e izquierda nos puteen con ganas, o nos conviertan en misterioso objeto de estudio para los cientistas políticos. Por si no se entendió:una diplomacia tan intrigante y exitosa como nuestra política económica y como las indagaciones antropológicas de nuestro presidente sobre el origen y la naturaleza de los argentinos y las argentinas.
Viernes 25.- En medio de la interna, Macri se reunió a solas con Rodríguez Larreta.- Se ve que haber escuchado lo apenado que ponían a Massa sus peleas por cargos les dio cosa y, apenados, ellos mismos se juntaron para dialogar sobre cómo meter a quichicientos aspirantes al servicio público en listas en las que ni los cursos de física cuántica de Schiavi los harían entrar. Seguramente Mauricio, otra alma sensible dolida por las crueldades de quienes no comparten sus valores inmanentes, habrá comunicado a Horacio sus inquietudes sobre las “miserias humanas” que quedan al descubierto en circunstancias como las que se transitan. Lo que viene a reflejar que mientras las áreas de interés de Alberto van por el lado de la metafísica, de quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos (pero en serio, no como en ese meme según el cual nos llama descendientes porque nos vamos al descenso), su antecesor se enfoca más bien en los estudios éticos, con una autoridad moral y una profundidad que no tiene nada que envidiarle al otro. De la síntesis de ambos, si se nos perdona el atrevimiento, podría empezar a emerger la figura del gran filósofo argentino. Todavía incompleta, eso sí, pero no por mucho tiempo. La estética y la retórica ya sabemos bien dónde irlas a buscar.