"Esperemos que se concrete la promesa de Trump de importar más carne argentina"

Productor ganadero en la provincia de Buenos Aires, La Pampa y San Luis, tiene su cabaña Angus a pocos kilómetros de Córdoba, en Rancúl, en el norte pampeano; esa localidad conocida en el mundo hispano por ser el terruño de Alberto Cortéz. “Tenemos a Córdoba a la vista”, describe Derito, para marcar la cercanía con la provincia.

El flamante presidente de Angus venía desempeñándose como vice de Bustillo y ahora escaló una posición en la estructura de la Asociación: “Es un cambio importante porque uno con la vicepresidencia es el segundo en la sombra. Está a un costado y acompaña al presidente en lo que haga falta o para reemplazarlo. La presidencia es ponerse la mochila encima”, relata en diálogo con Tranquera Abierta.

Y lo acompaña como vice un riocuartense...

Sí, el gran Fabián Otero; un gran amigo, un vice de primera, con gran experiencia, un puntal para el Angus en todo sentido. Que además se pone la exposición al hombro durante Palermo como comisario y con una gran actividad en la Zona Centro y un referente de consulta muy importante por su experiencia y por su aplomo.

Su cabaña está en el norte de La Pampa...

Sí, la cabaña la tengo muy pegadita a Córdoba, en Rancúl. Levantando la cabeza se ve Córdoba al otro lado. Pero la cabaña se inicia en Navarro, provincia de Buenos Aires, y tenemos todavía tambo ahí y tenemos algunas vacas; y también hacemos remate acá en Mercedes. Luego, desde el año 1995 que estamos en La Pampa y en el 1997 también en San Luis con campo de cría.

¿Qué nuevos desafíos se plantean para adelante desde la Asociación?

El gran desafío es darle continuidad a un muy buen trabajo que se ha hecho hasta ahora con las presidencias anteriores, de Alfredo Guzmán, Alfonso Bustillo, que nos dejan una institución muy sólida en cuanto a programas, y en su situación financiera porque todo lo que se hace es con recursos propios. Con Alfonso Bustillo, durante su gestión, se construyó el Arena Angus, en Cañuelas, el salón de eventos que vamos a usar la semana que viene en el cocktel anual, y una presencia en todo el país, en todo tipo de remates de invernada, de cabañas; hay una muy fuerte presencia de la asociación de Angus. Vamos a continuar eso y seguir levantando la puntería, estando cerca de los criadores, cerca de los exportadores, porque siempre decimos que nos interesa toda la cadena de la carne.

Hay un gran acuerdo de que hay un buen momento de la ganadería en la Argentina, ¿cómo lo ve?

Los mercados internacionales están muy demandados de carne vacuna y aparecen nuevos compradores, alternativas. Argentina siempre dependía fuertemente de la Comunidad Europea, pero apareció luego la demanda de Oriente, la de China en particular, en principio con carne quizá de bajo valor, pero luego un cambio de sus hábitos de consumo hizo que empezaran a consumir asimilando la forma occidental; incluso hay un nicho de carne de alto valor. Y luego, más reciente, la aparición de Estados Unidos como gran demandante de carne, que también comenzó con carne de bajo valor, y ahora estamos entrando también al mercado con más valor. O sea que son dos mercados que se nos abren, que empiezan a competir con la Comunidad Europea y nos dan perspectivas de futuro muy interesantes.

Ahí se recorta la promesa de Trump de multiplicar por 4 las toneladas a comprarle a la Argentina...

Sería una buena noticia, estamos esperando que se concrete; pero sí, multiplicar por 4 con bajo arancel es muy positivo. De cualquier forma se está exportando también con arancel más alto. Acá sería bajar el arancel. Y la otra perspectiva de futuro es con el nuevo régimen de trazabilidad, que empieza a partir del primero de enero, con el que podemos abrir dos mercados muy interesantes que tenemos cerrados, como son Corea y Japón, mercados importantes por los valores que pagan, pero que exigen una trazabilidad total. Tenemos vecinos, como los hermanos de Uruguay que tienen nuestro mismo estándar sanitario, que es libre de aftosa con vacunación, pero en función de tener un buen sistema de trazabilidad total, tienen esos dos mercados abiertos y es una ventaja competitiva importante.

Comienzan las caravanas electrónicas...

Sí, sí. Creo que tenemos que demostrar un plan serio de trazabilidad total que nos permita abrir esos dos mercados, y la caravana electrónica es una solución.

Yendo al mercado interno, ¿cómo está la situación ahí, especialmente por la suba de precios de los últimos meses?

Llamativamente se esperaba que hubiera alguna retracción por el alza del precio, que supera a la inflación y al índice de sueldos, pero se sostienen las cantidades. Para los argentinos el tema de la carne es muy importante como consumo y es una demanda muy inelástica. O sea, el mercado interno sigue tirando. Quizás haya más cortes de menor valor en la compra, pero la cantidad de kilos sigue firme y sostenido. O sea que también fue una sorpresa.

¿Los incrementos tienen que ver con un problema de oferta o es porque se está exportando más?

La relación exportación-mercado interno no ha variado mucho, entonces no diríamos que tracciona tanto la exportación. Si creció, creció cinco o seis puntos, aproximadamente porque no son números certeros, pero no es algo significativo. Sí es cierto que hay una falta de oferta. Recordemos que perdimos, por las malas políticas de los años anteriores, casi un millón de vientes, y entonces los resultados se ven tres años después. El vientre de hoy va a ser un ternero del año que viene, y que va a terminar con un novillo en dos años más. O sea que lo que pasa hoy es la consecuencia de dos años para atrás. Y ese ternero que falta es la oferta. Sumando a esto hay una exportación que tracciona con buenos valores.

¿Y hay influencia por la estacionalidad en estos meses de fin de año?

La estacionalidad se da por el ciclo. Normalmente los terneros que se empezaron en marzo, abril de este año se recrían, después pueden ir a corrales y empiezan a salir febrero, marzo; tal vez las primeras jaulas pueden salir en enero. Por supuesto que los corrales y los feedlots han limado bastante esos picos de estacionalidad, porque la hacienda encerrada permite a los frigoríficos, a los exportadores, tener un stock de donde echar mano cuando hay poca oferta y limar esos picos. Pero bueno, el ciclo ganadero es bastante alto y los destetes son, por ejemplo, en marzo, abril, mayo, junio, por lo que el novillo empieza a salir en enero, febrero, ¿no? El novillo, la vaquillona gorda empieza a salir un poco antes.

¿Dónde está parado el Angus argentino hoy en el mapa mundial?

El rodeo argentino es uno de los más grandes del mundo y tiene una calidad que normalmente cuando hay una exposición, como la exposición rural, donde viene gente del exterior y ve la calidad del angus argentino, le sorprende por cómo se mantiene esa calidad, esa plasticidad. Y mucho más cuando viajan al interior y ven a través del país que hay rodeos Angus muy adaptados a las distintas zonas. Siempre trato o tratamos de destacar que el Angus tiene dos características diferenciales importantes o fundamentales, entre otras. Una es la calidad de la carne, porque el Angus se identifica con calidad de carne y eso tiene que ver con el marmoleo o la grasa intramuscular que le da ese sabor, esa jugosidad, palatabilidad a la carne y es genético, es una condición genética. Y luego también la actitud materna de los rodeos de madres. Son madres fértiles, precoces, que se adaptan muy bien a todas las zonas del país, desde la Patagonia hacia el oeste, el litoral.