El nombre de Gustavo Idígora es sinónimo de complejo sojero, de exportaciones argentinas y de generación de dólares. Preside la Cámara de Industrias Aceiteras de la Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) que nuclea a las poderosas empresas del sector y que explican casi el 40% del total de las ventas del país al mundo.
Idígoras: "Difícilmente veamos estabilidad en el precio de la soja"
En exclusiva para Tranquera Abierta, el empresario referente del mercado sojero, expuso su mirada sobre el sector agroexportador.
En diálogo con Tranquera Abierta, el empresario aseguró que “el sector agroexportador será fundamental para la salida de la pandemia y ante la necesidad de reactivación de todas las economías regionales agroindustriales, de la producción primaria y de los insumos. Sabemos que en todo el territorio nacional el agro es una de las principales fuentes de empleo y entonces hay que buscar una política de reactivación rápida”.
También recordó el rol del flamante Consejo Agroindustrial Argentino que lo tiene como uno de los impulsores centrales y destacó que desde allí “les estamos haciendo propuestas al Gobierno nacional, a los gobernadores y al Congreso para generar una ley en el corto plazo con medidas de reactivación y crecimiento”.
En cuanto a los números, Idígoras señaló que “en materia exportadora, en el primer semestre el agro representó 74% del total de ventas al mundo. Eso quiere decir que cada 10 dólares, más de 7 provienen de las cadenas del agro y tenemos que seguir creciendo. Las proyecciones que tenemos nos muestran que le podemos agregar unos 16.500 millones de dólares más a los actuales niveles de exportaciones por año de la Argentina. Y eso es lo que necesitamos”.
Y agregó: “La pandemia dejó claro que el comercio internacional de alimentos sigue activo y puede seguir creciendo. Pero va a depender de nosotros cómo trabajamos en políticas activas, bajando la carga tributaria para el productor y logrando más industrialización del agro”.
Con respecto al cluster sojero, el presidente de Ciara y CEC destacó que “tiene hoy una capacidad ociosa muy grande, tenemos sectores con margen negativo dentro de la industria y eso nos preocupa mucho pero estamos trabajando activamente. En los próximos días se van a inaugurar dos nuevos puertos y estamos trabajando con el Gobierno para bajar la carga tributaria que es tan pesada y que necesita ajustarse”, remarcó.
En referencia a los precios de las commodities, que comenzaron a subir en las últimas semanas, Idígoras indicó que “es un mercado muy cambiante, con mucha incertidumbre y eso está dando la posibilidad de que tengamos algunas buenas oportunidades. En el caso del trigo es posible imaginar para el año próximo chances en ese sentido y también para la cebada. Y me refiero especialmente en las exportaciones hacia China, dado el cierre que tuvo Australia”.
Y en cuanto al precio de la soja “podemos ver bastante inestabilidad, cambios y vaivenes y difícilmente la veamos estabilizada dado que tanto la pandemia como la guerra comercial entre China y Estados Unidos generaron un momento de altísima incertidumbre”.
Según remarcó Idígoras el complejo oleaginoso-cerealero aportó, el año pasado, el 40,78% del total de las exportaciones de la Argentina. En ese marco, el principal producto de exportación del país es la harina de soja (13,5 % del total), que es un subproducto industrializado generado por este complejo agroindustrial.