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Carlos Gutiérrez: "La elección de noviembre tiene relación directa con el 2023"

El jefe del bloque de diputados de Hacemos por Córdoba, Carlos Gutiérrez, señaló que si los intendentes se ponen la campaña al hombro los resultados electorales serán mejores. "No hay lugar para grises", manifestó

Carlos Gutiérrez, jefe del bloque de diputados nacionales de Hacemos por Córdoba, señaló que la elección de noviembre tiene relación directa con el 2023, cuando se pondrá en juego la gobernación, y que no hay lugar para los grises. Es un mensaje para que los intendentes, a los que el propio gobernador JuanSchiaretti arengó la semana pasada y les pidió ponerse la campaña al hombro, salgan a buscar votos como lo hacen por ellos mismos.

El diputado habló también del encuentro en el que participó y que reunió a la Mesa de Enlace en Río Cuarto. En el hotel Urumpta, los dirigentes indicaron que las definiciones públicas del nuevo ministro de Agricultura de la Nación, Julián Domínguez, terminará irremediablemente en un conflicto.

-Usted y el ministro Sergio Busso estuvieron en el taller que hizo la Mesa de Enlace en Río Cuarto. ¿Qué se llevaron de ese encuentro?

- La verdad es que me ha sorprendido para bien constatar que el sector ha evolucionado en los ultimos años en torno a tener mucho más clara la necesidad de un cambio generacional dentro de la estructura gremial del campo. También advierten la necesidad de comunicar mejor la importancia que tiene el complejo agroalimentario para la sociedad. Son conscientes de que hay que eliminar esa visión del campo como sinónimo de indiferencia con respecto a los problemas sociales. También muestran una actitud mucho más prudente y responsable respecto de la conflictividad. Estos tres ejes marcan una evolución de los representantes de estos sectores.Esa evolución permite ensanchar el proceso que hemos llevado adelante en Córdoba y que implicó un trabajo conjunto, más allá de que muchas veces se puede pensar distinto por el rol que cumple cada uno. Aún así, siempre hemos encontrando los puntos de unión. Es mucho más fácil después del camino recorrido construir con esta dirigencia actual un modelo de gestión conjunta ligada al sector agropecuario.

- Su presencia y la de Busso son una señal política también en un momento de tensión entre el campo y el gobierno nacional.

- Nada en estos momentos deja de tener un contenido político. De todos modos, fuimos invitados como representantes de distintas institucionalidades y en mi caso fui como presidente del bloque Córdoba Federal. Claro que tiene un valor político pero el valor político que tiene no es coyuntural, trasciende la coyuntura electoral. No hay que olvidar que hace muchos años venimos construyendo esta relación que ellos mismos dicen que está basada en la confianza. No ha sido fácil construirla pero hoy está consolidada y apunta a ir por más. Uno se da cuenta en los temas de agenda, que cada vez hay más cuestiones que sólo se pueden consolidar en una provincia como Córdoba, no sólo por el potencial del sector sino por el tipo de relación que hay entre el campo y la gestión. Esa confianza se puede graficar con un ejemplo:a la Fundación de la Mesa de Enlace, que convocó a la reunión en Río Cuarto, es a quien el gobernador le dio toda la potestad para manejar todos los procesos de construcción de caminos rurales en su versión asfaltada o mejorada, la administración de los consorcios canaleros, en definitiva el manejo de recursos. Cuando hay esa confianza se puede avanzar en este sentido. El capital político para nosotros radica en esa relación tan bien construida.

- En el anuncio del plan agroindustrial que hizo Domínguez no estuvo Córdoba.

- La verdad, no deja de sorprender. Cuando fui ministro de Agricultura, Julián Domínguez dirigía la cartera a nivel nacional y ya por entonces puso en la cancha el programa alimentario nacional y tenía enunciados rimbombantes de este tipo, todos objetivos locales pero con muy poca base en cuanto a las decisiones que harían posibles esos objetivos. Vuelve a darse el mismo estilo ahora, de presentar un programa para generar 700 mil puestos de trabajo pero se dice abiertamente o en privado a los representantes de la Mesa de Enlace que las retenciones no se pueden tocar. Dicen que las retenciones son clave para bajar la pobreza de los argentinos. Pero cuánto hace que tenemos retenciones y, sin embargo, la pobreza no sólo no ha bajado sino que se ha profundizado. Una vez más, las retenciones no son la causa de esa pobreza estructural sino que son los recursos que los distintos gobiernos han detraído de las provincias productoras y nada ha vuelto ni por cerca a cambio. Estos anuncios que se hicieron sin el campo sería como hacer una Afa sin clubes. Es una cuestión notoria cómo se reincide en planteos que ya casi terminan siendo, por su inconsistencia, muy frágiles. Estamos frente a un programa estratégico agroalimentario en el que no estuvieron los productores.

- El gobierno de Córdoba ha sido muy contundente en su rechazo a la flexibilización del cepo a la carne.

- Es que no sólo es insuficiente sino errado en el diagnóstico. Es errado en su ejecución y, lo que es peor de todo, en el resultado. Pensar que en el período analizado, desde 2006 a esta parte, la inflación fue del 800 por ciento mientras la carne aumentó un 1.800 por ciento, marca claramente que no son las exportaciones de carne las que generan la zozobra de la mesa de los argentinos sino que es un proceso estructural de permanencia de la inflación, generado entre otras cosas por un aumento desenfrenado del gasto muchas veces con sentido electoralista, como el que hoy en día estamos presenciando. Que el gobierno de Córdoba no haya sido invitado a la presentación del plan ya no llama la atención porque parece que quieren hacer su fiesta sin los partícipes institucionales o productivos de las provincias que realmente protagonizan todo el proceso productivo.

- Schiaretti reunió a los intendentes y les reclamó que se pongan la campaña al hombro. ¿Por qué ese acento específico en los jefes comunales?

- El gobernador ha caracterizado muy bien el mensaje que dieron las urnas. El primer mensaje que nos transmitió es que hoy hay una oposición unida en Córdoba. Entonces eso queda ligado al hecho de que la elección de noviembre tiene relación directa con 2023 y tiene relación directa con lo que Hacemos por Córdoba ha construido junto a los intendentes, en un entramado de abajo para arriba. Ha sido un proceso de una riqueza muy importante porque los dirigentes y los legisladores hemos sido la correa de transmisión hacia arriba y hacia abajo de las necesidades territoriales. Eso nos permitió tener un termómetro permanente para resolver los problemas de cada comunidad. El llamado del gobernador es a los intendentes para que defiendan lo que ellos mismos protagonizaron como constructores. El modelo no se pudo construir por dos iluminados, por Schiaretti y De la Sota, sino por una constante construcción de los intendentes, de abajo para arriba. Defender esto, la continuidad de este modelo que consideramos exitoso, tiene que llamar a los intendentes a ponerse la campaña al hombro como lo hace el propio gobernador. Tienen que salir a convencer de la misma forma que lo hacen cuando son candidatos en sus pueblos y obtienen resultados muy sorprendentes. Si bien es cierto que son distintas elecciones, si los intendentes se ponen la campaña al hombro, los resultados pueden mejorarse sensiblemente. A sabiendas de que podemos mejorar el resultado, podemos consolidar lo que ya parece irreversible, que es una banca de senador, e ir en pos del tercer diputado. En la configuración de la Cámara que se viene, cada diputado va a tener un rol muy importante y va a ser clave para poder conseguir cosas para Córdoba.

- ¿El reclamo a los intendentes es porque no se comprometieron en las Paso?

- Como lo han dicho los propios intendentes o intendentas, por ejemplo Carolina Basualdo, de Despeñaderos, que ganó en su distrito y que en el acto dio un discurso de una autocrítica profunda. Eso llama a la reflexión porque no sólo es posible hacer lo que hicieron ellos, que ganaron con solidez, sino que lo deben hacer en función de ese interés estratégico que los tiene a ellos jugando como protagonistas. Lo otro que ha quedado claro es la definición de que en esta elección no hay más lugar para los grises: las alternativas autodefinidas peronistas fueron puestas en su lugar por el electorado y hoy son una representación inválida para enfrentar a esa oposición unida. Por lo tanto, la definición ha sido que cualquier voto que se desvíe del eje principal le hace el juego a la oposición. Evidentemente, los intendentes pueden dar mucho más de lo que han logrado si se ponen la campaña al hombro.