Una gran cantidad de feligreses concurrieron desde distintos puntos de la región a la Basílica de Sampacho y se unieron a los devotos locales para pedir consuelo y ayuda a raíz de la crítica situación que se está viviendo
Una multitudinaria expresión de religiosidad popular hubo ayer en el Día de la Virgen de la Consolata de Sampacho.
Muchos devotos de María concurrieron a la Basílica de Sampacho, desde distintos puntos de la región, y se unieron a los fieles locales, para pedir consuelo y ayuda por la situación económica.
El momento cúlmine de la tradicional celebración religiosa fue a las 15 cuando la imagen de Nuestra Señora de la Consolata salió de la Basílica que lleva su nombre para dar comienzo a la procesión.
“La Consolata es la Virgen que consuela al pueblo, es como la madre que consuela a sus hijos. Esta fiesta es verdadera renovación de fe para todo el pueblo de Dios”, manifestó el párroco Osvaldo Leone.
Nuestra Señora de la Consolata es una advocación mariana muy venerada y en Sampacho se celebra con una fiesta patronal.
Su devoción se remonta a Turín, Italia, donde se encuentra su santuario principal y su imagen sagrada.
La “Consolada y Consoladora” es la que “brinda consuelo a la humanidad”.
Su imagen llegó a Sampacho en 1908 y miles de peregrinos de distintas parroquias se unen todos los 20 de junio a los fieles locales para caminar las calles de la localidad.
“La Consolata es la Virgen que consuela al pueblo, es como la madre que consuela a sus hijos. Esta fiesta es verdadera renovación de fe para todo el pueblo de Dios”, manifestó el párroco Osvaldo Leone, quien estuvo a cargo de la organización de la patronal.
Pesa 1.230 kilos y es portada por 30 hombres en una ceremonia con un fuerte contenido cristiano.
De acuerdo con su historia, “en 1946 el templo fue declarado Santuario y desde el 10 de junio del año pasado se elevó a Basílica”.
La fecha fue coincidente con “los 90 años transcurridos desde el terremoto de Sampacho, que provocó la destrucción de parte de las viviendas del pueblo y que, milagrosamente, no tuvo víctimas fatales, situación que los devotos adjudican al manto protector de la Virgen de la Consolata”.
La conmemoración religiosa estuvo complementada con diversas actividades alusivas que se desarrollaron durante la jornada celebratoria.
Muchos fieles se acercaron ayer a la Virgen de la Consolata “en busca de consuelo por la angustia que tienen”, en virtud de la díficil situación que están viviendo.
