Según el Centro de Almaceneros, "el incremento en la Canasta Básica de Alimentos, como en el precio del transporte urbano de pasajeros y en las tarifas de agua y electricidad -que subieron entre 3% y 4%- aportaron una presión adicional a la inflación que en noviembre fue del 2,4%".
Para no ser pobre, una familia debió ganar en noviembre más de $ 1,6 millones y para no ser indigente, más de $ 879 mil.
Los indicadores sociales son:
- El 58,3% de los hogares no logró cubrir la Canasta Básica Alimentaria (CBA).
- Del grupo que sí consiguió alcanzarla, el 72% dependió de asistencia estatal (AUH, Tarjeta Alimentar, programas provinciales, etcétera).
- En el 51,7% de los hogares, al menos un integrante eliminó alguna comida diaria, principalmente la cena.
- El 31,2% reportó hambre no satisfecho.
- El 19,8% debió pedir comida o dinero para alimentarse.
- El 11% tuvo al menos un miembro que comió solo una vez al día o directamente debió ayunar forzosamente.
- El 89,2% debió financiar alimentos, con tarjetas de crédito (41,4%), al fiado (37,7%), con dinero prestado (10,1%) y sólo el 9,8% pudo adquirir los alimentos sin financiarlos.
"El resultado es contundente: la alimentación se sostiene cada vez más sobre deuda y asistencia, un indicador grave de profundización de la vulnerabilidad estructural", señala el informe.
"El consumo volvió a mostrar retrocesos importantes. En noviembre, las ventas minoristas cayeron 9,2% en el año en volumen", agrega.
"En el acumulado enero-noviembre 2025, frente al mismo período de 2024, la baja asciende al 21,9%, un desplome que tiene su explicación en el hecho de que durante casi todo el año la inflación avanzó por encima de los incrementos salariales, deteriorando aún más el poder adquisitivo", indica.
"Los datos económicos y sociales de noviembre del 2025 plantean un escenario en el que la contención inflacionaria convive con un deterioro profundo del tejido social y comercial", indica.
"Desde una perspectiva comercial, la caída del consumo deja al sector minorista frente a uno de los años más difíciles al menos de la última década", concluye.
