Zoe Peralta Gatica tiene 19 años, es de Córdoba capital y es una de las 120 personas que están trabajando voluntariamente (sin recibir una remuneración) en las distintas acciones que se desarrollan para mitigar el avance del Covid-19 en RíoCuarto. Desde hace unos días, la joven está en la ciudad para ayudar con el control de las actividades que se están realizando en la Base de Operaciones de Testeos que funciona en la Escuela Superior de Bellas Artes Líbero Pierini.
En diálogo con Puntal, Zoe contó que no ve a su familia desde hace dos meses, pero remarcó que está dispuesta a todo para ayudar en la pandemia.
“Soy voluntaria del COE Central (Centro de Operaciones de Emergencias). Soy paramédica y ahora estoy destinada en Río Cuarto. Estamos parando en un hotel de la ciudad y cumplimos con nuestra tarea en la Base de Testeos. Conformamos el equipo SAR (Sistema de Acción Rápida) y vamos a los pueblos y ciudades que tienen dificultades con el Covid-19, en donde armamos una estructura junto al Ejército, la Fuerza Aérea y los voluntarios”, señaló.
-Te formaste como paramédica y estás preparada para este tipo de situaciones…
-Sí, me encanta. Este tema me apasiona. Hace dos meses que no veo a mi familia, pero estoy dispuesta a dar lo que sea con tal de ayudar.
-¿Te sumaste desde el primer momento en el que lanzaron la convocatoria a los voluntarios?
-Sí, apenas salió la convocatoria en Córdoba capital me inscribí. Al mes de eso me llamaron y comencé a trabajar. Primero fui escribiente, después hisopadora y ahora estoy en la Base de Operaciones de Testeos, donde reviso y me encargo de que los escribientes e hisopadores hagan bien el trabajo. Mi tarea tiene que ver con que todo el sistema funcione correctamente.
-¿Has estado en varios pueblos y ciudades?
-Estuve en Córdoba capital, después un mes en Villa Dolores y luego varias semanas en el Corredor 9, pasando por localidades como Oncativo, Pilar y Río Segundo. Ahora, desde hace tres días, estoy en Río Cuarto.
-¿Cómo lo tomó tu familia?
-La distancia es importante, pero nos hablamos todos los días y nos mandamos mensajes.
-¿Tenés miedo a infectarte?
-Al principio sí, tenía mucho miedo. Pero a medida que fui participando de los operativos se me pasó. Me cuido mucho, al igual que todo mi equipo.
-Has visitado muchas localidades y has visto a mucha gente, ¿qué dicen las personas cuando van a ser hisopadas?
-Hay muchos que tienen miedo porque creen que les vamos a hacer mal. En realidad, el hisopado es un técnica invasiva, pero no tanto como una extracción de sangre, por ejemplo. No es doloroso. La gente por ahí siente miedo porque una va con barbijo y con esos trajes tipo astronautas. Algunos piensan que nosotros tenemos el virus, pero cuando les explicamos cómo es el procedimiento se tranquilizan.
-¿Tenés trabajo?
-No, no tengo, pero estoy buscando trabajo. De todas formas, ahora estoy a full como voluntaria en el COE y eso me ocupa muchas horas. Me gusta mucho estar acá.