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El fideicomiso de maíz y trigo sería casi un punto más de retenciones

En valores absolutos creen que alcanzará los 6 o 7 dólares por tonelada que aportarán los productores para que la industria reciba los granos más baratos. Se quejan por la transferencia a otro eslabón de la cadena

Las cuatro cadenas de granos, la de soja (ACSoja), de trigo (ArgenTrigo), del maíz y sorgo (Maizar) y del girasol (AsaGir) se sumaron ayer a los cuestionamientos lanzados por unanimidad desde las entidades que integran la Mesa de Enlace contra la conformación de un fideicomiso para el trigo y el maíz, tal como existe en el girasol.

La intención del Gobierno con ese mecanismo es “desacoplar” los precios internacionales de los granos de los internos para evitar que se trasladen luego a los alimentos. Los productores agropecuarios y las entidades que los representan aseguran que eso no logrará el efecto deseado y que sólo se trasladarán recursos del eslabón primario al industrial.

Según los primeros cálculos, el aporte a este fondo implicará una cifra equivalente a casi un punto de los derechos de exportación, por lo que si se suma al porcentaje vigente alcanzaría un 13% en total (12% de derechos de exportación que pagan el trigo y el maíz más uno adicional por el fideicomiso).

Andrés Costamagna, director de Sociedad Rural Argentina, estimó que, “además de la retención y del tipo de cambio diferenciado que debe afrontar el sector, hay ahora un aporte de entre 10 y 12 dólares por tonelada para integrar el fideicomiso de aceite y 6 o 7 dólares para el del trigo y maíz”.

Gabriel De Raedemaeker, vicepresidente de CRA, lo ubicó en términos porcentuales: “El Gobierno dice que será el equivalente a 0,4%, pero nuestros cálculos hablan de mucho más; algo así como casi un punto adicional a las retenciones”, indicó el dirigente.

En ese marco, las cadenas remarcaron, en un comunicado, que cuestionaban “la política pública que obliga a sectores de trigo, maíz y girasol a construir mecanismos privados de subsidios a empresas de abastecimiento interno”.

Y agregaron: “Estos fideicomisos generan distorsiones de precios y producen estímulos negativos para las producciones de las materias primas. Generan transferencias artificiales entre eslabones de la cadena de valor y no solucionan las necesidades del consumidor, porque los canales de distribución siguen incrementando precios mientras a los abastecedores se les congela su precio”, remarcaron las cuatro entidades.

Luego pidieron que “se combatan las verdaderas causas de la inflación, trabajando en materia de política monetaria, fiscal y crediticia”.

Y remataron: “Es inadmisible que las cadenas agrícolas sigan pagando los costos de políticas macroeconómicas fallidas”.