Otras dos fiestas clandestinas, con cerca de 1.000 jóvenes que consumían bebidas alcohólicas, siendo una de ellas reincidente en apenas 24 horas, fueron clausuradas en la madrugada de ayer en la ciudad, tras un nuevo operativo llevado a cabo en forma conjunta entre el Ente de Prevención y la Policía, en el marco de los controles previstos en el decreto provincial que regula las restricciones que rigen para Córdoba.
Una de las fiestas mencionadas se desactivó en la calle Cardarelli, en el barrio Alberdi, con 350 jóvenes, exactamente en el mismo lugar donde 24 horas antes se había desmantelado otra similar.
Efectivamente, el sábado se clausuró en esa dirección al 200 una reunión masiva de la que participó la misma cantidad de personas.
Y, precisamente, ayer a la madrugada se intervino en ese mismo lugar, con lo cual se está en presencia de un hecho reincidente.
Según fuentes consultadas por Puntal, por tratarse de una reincidencia al responsable de la reunión masiva no autorizada le cabe directamente una imputación por atentar contra la salud pública.
En la ocasión, el Área de Espectáculos Públicos labró las actuaciones pertinentes, las que fueron derivadas a la Fiscalía de turno.
Según fuentes consultadas por Puntal, por tratarse de una reincidencia al responsable de la reunión masiva le cabe directamente una imputación por atentar contra la salud pública.
La otra fiesta desactivada se produjo en la calle Juan Díaz de Solís (barrio Alberdi), donde participaban 600 personas, con lo cual la cantidad de jóvenes en las reuniones clandestinas de ayer roza el millar.
Las actuaciones de ese evento irregular también fueron remitidas a la Justicia.
Sanciones
Como informó Puntal, las multas por incumplimiento a las restricciones en vigencia llegan hasta los 500 mil pesos y se duplican en caso de reincidencia.
Pero además la Justicia analiza la aplicación de imputaciones a los organizadores de dichas fiestas, remarcaron las fuentes consultadas por este diario.
Desarticularon 21 reuniones masivas en Córdoba, Santa Fe y Mendoza
Al menos 21 fiestas clandestinas con más de 1.500 participantes fueron desarticuladas el fin de semana en Córdoba, Santa Fe y Mendoza por violar el Decreto de Necesidad y Urgencia del gobierno nacional que prohíbe la circulación nocturna y las reuniones sociales, con el objetivo de mitigar durante la segunda ola de la pandemia el aumento de casos de coronavirus.
En La Calera desactivaron una fiesta con 84 personas, en Río Ceballos, otra con 63 participantes de una reunión en un domicilio y en la capital provincial, al menos otras con una presencia de hasta 150 asistentes.
La Policía informó que “en base al análisis previo y datos obtenidos de redes sociales se instalaron dispositivos preventivos en distintos sectores, lo que posibilitó que se mitigara el desarrollo de encuentros no autorizados”.
“Asimismo, se logró desarticular una serie de eventos, labrándose las actas correspondientes a los responsables”, indicaron fuentes policiales.
Estas se suman a las que se desbarataron en la ciudad de Río Cuarto, donde se labraron actas de infracción a cargo de autoridades municipales y policiales.
Marcelo Irastorza. Redacción Puntal