El legendario animador, "Cacho" Fontana, quien el último viernes cumplió 89 años, fue trasladado en la mañana del domingo de la Clínica de Rehabilitación y Geriatría Inter Plaza, donde se hospeda, al Hospital Fernández. Sin embargo, todavía no se sabe si su complicación pulmonar se debe a un re contagio de Covid-19, lo que era una de las mayores preocupaciones de su familia.
Fontana fue vacunado en el mes de marzo con la primera dosis de AstraZeneca, pero en su momento el virus lo afectó como a buena parte de los adultos mayores de nuestro país. En julio del año pasado, se infectó junto a otros residentes de la residencia en la que vive y lo tuvieron que internar un par de semanas. Mientras que en febrero de este año, los pulmones volvieron a fallarle y necesitó una nueva hospitalización en el nosocomio de Palermo a raíz de una neumonía.
En ese contexto, deseó poder volver a sus actividades pronto. “Es lo único que quiero y es lo único que no me dejan. Yo tengo una idea para la televisión, tengo el armado para hacerlo de pie a cabeza. Pero si no, quiero seguir haciendo radio. Esto ahora se cortó y es otra vida a la que tenemos que acostumbrarnos”, había dicho.
Sin embargo, en una reciente entrevista con Teleshow, durante la semana pasada, Cacho volvió a insistir en el tema laboral: “Es difícil no hacer nada, no tener compromisos... Tenemos que tener paciencia. Pero me hace mucha falta el trabajo. Es lo único que extraño. No quiero hacer alarde, pero estoy en condiciones. Todavía tengo una memoria al pie del cañón y una vida cargada de experiencia”.
“Pienso mucho en el pasado y recuerdo lo que viví, para bien... Tengo en cuenta a mis compañeros, como a Antonio Carrizo, que fue un maestro para mi. Y a muchos otros”, agrega y, antes de despedirse con amabilidad tras una charla corta pero cargada de definiciones, reflexiona: “Mi cumpleaños es un día más. No lo festejo con gracia porque son muchos años, pero celebro que los estoy viviendo”.