“La familia está destruida, muy mal”, afirmó Pretto en diálogo con Puntal AM.
El viceintendente de Córdoba explicó que su estudio jurídico se sumó como querellante por la amistad de años que tiene con la familia de Marcelo Gutiérrez.
“La muerte de un hijo no tiene remedio y menos en estas circunstancias, que un conocido de la familia sea el autor del hecho. Con el dolor que están soportando están dispuestos a contribuir a la justicia y que la investigación avance lo más rápido”, señaló Pretto.
Aclaró que la querella la compartirá junto al abogado Santiago Capdevilla -penalista de su estudio-, al tiempo que resaltó la medida del fiscal José Mana, al modificar la imputación de Néstor Soto, de 21 años.
"En primer lugar, la importancia del cambio de la carátula es debido a la gravedad del hecho y de toda la prueba colectada con todos los indicios que son muy fuertes y que se configurarían en el delito de femicidio o de homicidio con alevosía y con violencia de género", dijo Pretto.
La nueva calificación de "homicidio con alevosía y con violencia de género" o "femicidio" contra Soto contempla una pena de "prisión perpetua de 35 años".
“La prueba recolectada es contundente”, indicó Pretto, al mencionar que si bien hay un secreto del sumario, por los trascendidos periodísticos hay “una cantidad significativa de elementos, incluyendo registros de cámaras de seguridad, ubicaciones de teléfonos y otros elementos que podrían ser determinantes en la etapa preparatoria”.
Proceso
La investigación del fiscal José Mana avanza en el proceso para determinar si Soto actuó solo o con la participación de otras personas.
Una hipótesis indica que al femicida buscó alguien y lo llevó hasta su casa de barrio Jardín, donde estranguló a Catalina. Hay testigos que afirmaron haber escuchado a al menos tres personas hablar de quemar el automóvil Renault Clío, que fue abandonado con el cuerpo de la joven en su interior en barrio Ampliación Kennedy, en el sur de la capital provincial.
Soto recién sería indagado la próxima semana. Luego se levantará el secreto de sumario.
“Catalina y Soto tenían una relación normal que vos qué te vas a imaginar. Cuando vos vas a la facultad sos amigo de tus compañeros, confiás plenamente en ellos, ¿cómo pensás que uno te va a querer matar?”, señaló Eleonora Vollenweider, la mamá de la joven asesinada el martes pasado en Córdoba.
Agregó que su hija nunca le había comentado sobre comportamientos extraños por parte del detenido, quien confesó el crimen al indicar que estaba enamorado de Catalina.
