Agustin Olivero y Guido Rodriguez, de 25 años de edad, son jóvenes oriundos de la ciudad y desde hace un año son egresados de la carrera de Arquitectura en la Universidad de Mendoza.
Son los autores del proyecto del aeropuerto visionario de Río Cuaro que responde a las necesidades actuales de la ciudad y toda su región y además revaloriza los sistemas de transporte, ya que son esenciales para el desarrollo de la ciudad, y da cuenta de la importancia del área de influencia e incentiva el intercambio social y cultural de las personas.
“Fue una búsqueda; en el secundario ya tenía mucha relación con la construcción y me gustaban los contenidos. Desde un principio elegí esta vocación” dijo Rodriguez.
Por otro lado, Olivero comentó “Siempre me atrajo pero no tenía un conocimiento previo de la carrera. Actualmente, trabajo en una empresa constructora en la ciudad”.
Este proyecto del aeropuerto para la ciudad es la tesis que defendieron para culminar su etapa universitaria en el 2022.
“Este trabajo final lo encaramos pensando en el transporte, creemos que uno de los más importantes era el áereo. Así que nos pusimos a investigar y estudiar acerca de este medio de transporte. Fue un desafío muy grande teniendo en cuenta a escala lo que es el proyecto en sí”, destacaron los arquitectos. Y sumaron: “Tuvimos dos años de investigación y trabajo. Pensamos en cómo esta propuesta puede aportar al crecimiento de la ciudad a futuro”.
Olivero y Rodriguez apuntan a que Río Cuarto tiene una localización muy eficiente para este establecimiento, no sólo para los riocuartenses sino también para la gente de la zona.
Frente al proyecto, los arquitectos dijieron que ellos proyectaron el edificio terminal y sumaron: “Este sistema tiene toda una infraestructura que es obligatoria para su operatividad y su funcionamiento, pero por el lapso de la tesis nos adentramos a eso. A lo largo de toda la investigación hubo falencias en la infraestructura por la escala y demanda que requiere la ciudad, entonces fuimos viendo y acortando dentro del proyecto” destacaron los arquitectos y agregaron: “Queriamos dar respuesta con una propuesta de lo que Río Cuarto necesita con la idea del aeropuerto actual. En este proyecto, planeamos no sólo el funcionamiento del servicio áereo sino también un bar, para darle un plus al establecimiento. Y que haya mayor flujo y uso al que hoy actualmente se da en la ciudad”.
Los arquitectos relataron cómo fue el procedimiento del proyecto en el que primeramente escalaron el aeropuerto utilizando programaspara el diseño y a su vez, ver qué tipo de aeropuerto se adaptaba a la ciudad y cómo iba a responder tecnológicamente con la parte constructiva, tomando en cuenta valores económicos y de rápida y facil ejecución más allá del funcionamiento del mismo.
Anexaron también: “ Realizamos investigaciones y estudios sobre la región, tomamos un radio del aeropuerto de la ciudad teniendo en cuenta los usuarios que utilizarían nuestro proyecto para que realmente tenga una utilidad y una operatividad eficiente. Hoy en día sabemos que no hay mucha demanda, ya que muchos usuarios tienen una imagen negativa. Cuando un servicio es eficiente y responde a las necesidades, las personas lo utilizan”.
A futuro, Olivero y Rodriguez destacaron que su propuesta es factible como varias infraestructuras más que le faltan a la ciudad para su crecimiento y que va a dar un aporte significativo no sólo a la ciudad sino también a alrededores y zona.
“Permite darle un acceso a toda la gente de la región y a otras provincias que pueden llegar a venir a la ciudad a nivel nacional, apuntando al crecimiento que se va dando de a poco pero todo va sumando y aportando a Río Cuarto”.
Los arquitectos reconocieron que son jóvenes y que apuestan a que sean escuchados: “Es una linda satisfacción vernos frente a este proyecto y las respuestas que tuvo. Son gratificantes estas posibilidades, venimos con cinco a seis años de carrera y plasmamos todos nuestros conocimientos en esta tesis. Buscamos un beneficio para aportar a la ciudad y hay que animarse a apostar a cada proyecto que tienen los jóvenes” recalcaron.
Desde el punto de vista de los arquitectos: “Lo que más nos motivó fue la pasión en lo que uno hace,cuando uno encuentra eso, no hay tiempo, no hay horarios,no hay un porqué para hacerlo, simplemente lo haces porque te gusta y te apasiona. Tenemos que ser visionarios, pensar en el hoy y en el mañana. Aprender a escuchar, a observar y experimentar frente a lo que queremos hacer. La escucha es fundamental” señalaron y acotaron: “El estudiar, el aprender es muy importante. Y nunca perder la motivación, tiene que acompañarla con la pasión, el estudio y las ganas”.
Y entusiasmados dijieron: “Todos tenemos que tener proyectos y metas a corto o largo plazo, es el motor de lo que uno hace. Hay que planificar y proyectar lo que uno quiere demostrar, hacer, estudiar. Y apostar a lo que a uno le gusta y motiva”.