Tres días a puro arte vivieron niños, adolescentes y adultos mayores del taller municipal de Monte de los Gauchos, quienes aportaron sus pinceladas para realizar un mural homenaje a la selección argentina junto al artista Gastón Liberto en la ex estación de trenes del pueblo. Si bien la obra llevó un arduo trabajo de 10 horas diarias, esto no resultó un impedimento para que los más de 70 integrantes de este grupo disfrutaran cada instante para pintar, mientras bailaban y compartían mates.
Monte de los Gauchos: 70 chicos y adultos pintaron un mural homenaje a la selección
La obra fue dirigida por el artista Gastón Liberto. Participaron los miembros del taller municipal de arte. En tres jornadas, a puro pincel y música, lograron culminar el retrato
En diálogo con Puntal, el reconocido muralista de la región aseguró que la tarea fue muy enriquecedora, se mostró conforme con los resultados y recalcó la importancia de esta experiencia artística en honor a La Scaloneta. Él fue quien estuvo a cargo de dirigir la tarea y esbozar en principio el diseño del mural de 12 x 3 metros en el que se reflejan los rostros de Julián Álvarez, Lionel Messi y Emiliano “Dibu” Martínez.
En medio del trabajo, se hizo presente el intendente Ariel Grich, quien felicitó a los participantes y también pintó unos trazos.
Según comentó Gastón, la propuesta llegó desde la profesora del taller Lorena Dutto, con quien se conocieron cuando él se encontraba realizando un mural colectivo. “Ella me convocó al pueblo y presentó la propuesta al Municipio para hacer un homenaje a los campeones del mundo”, dijo.
Explicó que el mural se fue formando con ideas que partieron de los integrantes del taller municipal hasta llegar al boceto final. “Querían hacer a Julián Álvarez por Córdoba, a Messi con la copa y al Dibu Martínez como el arquero de la selección. Así que armamos el diseño, lo confirmaron y el viernes (pasado) a la mañana empezamos. Tuvimos la sorpresa de que nos estaban esperando con mucha emoción”, comentó el artista sobre el arribo a Monte de los Gauchos.
Asimismo, contó que los chicos “venían trabajando ya con la obra mía desde hace un año porque yo les había dado unos libros, así que conocían mucho mi trabajo”. “Nos dieron una bienvenida hermosa. Fueron más de 70, desde niños de 4 años y adolescentes que nos esperaron en la ex estación de tren. Compartimos primero una merienda y después nos pusimos todos a pintar”, detalló.
A propósito, el muralista rescató el alto conocimiento sobre pintura que poseen adolescentes, niños y adultos mayores que asisten al taller municipal. “Fue una hermosa sorpresa encontrarnos con el gran nivel artístico que tienen los chicos. Es muy grato ver el muy buen trabajo que hace la profesora. Es muy estimulante y se nota muchísimo desde los chicos de 5 años hasta los más grandes que tienen mucha noción de lo que es el arte y de técnica”, subrayó.
Sobre la obra realizada de manera colectiva, Gastón admitió que “fue gran un desafío porque se trata de un retrato de un mural realista que tiene bastante dificultad”. “Realizamos una especie de taller en el que participaron todos, desde el diseño de base hasta el diseño de la paleta de colores. Fue un reto muy grande porque yo no trabajo en formato taller, esto tiene mucha dificultad pero con el nivel que tenían los chicos lo pudimos hacer y fue algo muy lindo”, recalcó.
“En tres jornadas pudimos terminar el mural y desde el minuto uno todos participaron. Desde el diseño porque primero hay que hacer una grilla, una estructura; y todos fueron parte. Tenían muchas ganas de participar porque ya conocían la obra. Ellos ya habían trabajado previamente sobre la obra, yo siempre les mando un diseño previo al dibujo para que puedan colorear y familiarizarse”, precisó. Y reconoció que realizó “una master class sin haberlo planificado cuando vi la energía que tenían los chicos. Para mí fue un desafío, no solo porque se trataba de un retrato que es difícil de lograr, sino que tenía la tensión de guiar a los chicos. Fue un grupo muy lindo el que me acompañó junto a la profe”, expresó.
“Muchas veces me tomaba un descanso y los chicos seguían, acompañaban con música y con baile, disfrutando del encuentro y del arte. Ahí no hay diferencia de edad, no diferencias sociales. Bailaban todos, compartían unos mates. Lo que se vivió fue una gran experiencia”, afirmó.
Respecto de la experiencia vivida recalcó que “fue muy enriquecedora y de aprendizaje, más allá del resultado”. “Vengo trabajando en ciudades grandes, en pueblos chiquitos, en diferentes países con distintas realidades; es notable el estímulo que tienen del arte los chicos, te das cuenta cuando hablan, cómo colaboran, están atentos y participan”, cerró.