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Enrique Lukasiewicz y Martín Lukasiewicz finalizaron el 25º Rally de Montecarlo Histórico

Una participación que tuvo buenos parciales y varios problemas hizo que el binomio riocuartense finalizara 66º en la Categoría IV y 169º en la Clasificación General, sobre 232 arribos

Luego de 16 pruebas especiales divididas en cuatro etapas, el binomio riocuartense compuesto por Enrique Lukasiewicz y Martín Lukasiewicz, a bordo de un Autobianchi A112 Abarth, finalizó en la posición 169 de la clasificación general y 66 en la categoría IV, sobre un total de 232 autos que concluyeron el 25º Rally de Montecarlo Histórico.

Enrique Lukasiewicz, piloto del binomio, luego de terminada la prueba y antes de la cena de premiación final, conversó con Puntal para contarnos cómo fue esta, su cuarta presentación en el mítico Rally de Montecarlo.

Así nos fue explicando la carrera que hicieron y los pormenores que tuvieron que sortear para llegar al final de cada tramo.

“En los dos primeros tramos anduvimos muy bien, terminando 97 y 31 en el primero y 86 y 26 en el segundo (general y categoría), pero en el tercero tuvimos una pérdida de camino que nos hizo penalizar mucho y nos caímos en la clasificación.

En esta carrera, cuando uno se equivoca de camino 100 metros, se penaliza con muchos puntos. Esta fue la causa de caer al puesto 159 en la general y 53 en la categoría”.

También contó lo vivido en la segunda etapa: “En el afán de recuperar, tratamos de andar un poquito más fuerte de lo que se podía; el auto es muy chiquito y con poca potencia, por lo que hicimos dos trompos y seguimos penalizando, pero anduvimos bien, siempre en el medio de la clasificación”.

“En la tercera etapa tuvimos una penalización de 30.000 puntos, la máxima penalización, porque no haber corrido una prueba especial y haber entregado el carnet horario tarde hicieron que nos penalizaran con el máximo de puntos. El problema fue que se nos cortó un cable en el distribuidor donde está la placa del encendido electrónico y tuvimos que esperar para arreglar y nos hizo perder un ZR (tramo cronometrado)”.

También comentó: “Al caer tan atrás, recuperar es muy difícil y logramos hacerlo en algunos puestos, pero muy pocos”.

El final del Rally se corrió con pruebas nocturnas y algunos de los tramos especiales más clásicos de esa competencia, algo así como“El Cóndor-Copina” en el Rally de Argentina, el famoso Col de Turini De La Bollene a Moulinet, un tramo 22 kilómetros que tuvo un piso muy difícil, con mucha nieve y hielo. Así lo contó: “En los dos últimos tramos recuperamos 14 puestos, lo que es mucho, porque se corrió por caminos muy difíciles, en bajada y de noche. Al correr en velocidad máxima con un auto que tiene 1.100 c.c. es para estar en la parte media, no en la punta, eso lo sabíamos y lo asumimos así desde un principio, estar siempre en la parte media, que es lo que veníamos a buscar”.

Por último, recalcó: “Esta es la cuarta vez que lo corremos y vemos que cada año se ha hecho más difícil, más competitivo y con mayor profesionalidad tanto en los equipos como en la preparación de los autos y cada binomio de punta hace un trabajo totalmente profesional. Por eso, para nosotros venir a correr esta sola competencia en este difícil torneo y estar en la parte media del pelotón, sobre la base de las penalizaciones que tuvimos cuando no se presentaron problemas, es un logro total y nos deja muy conformes. Ahora, a descansar unas horas y luego tenemos la cena y entrega de premios, que es una parte más de esta emblemática carrera. Vamos a compartir con Claudio Enz, un suizo nacido en Italia, que ha corrido cuatro años con un Autobianchi A112 como el que corrimos nosotros y hace dos años se cambió a correr con un Lancia Fulvia Coupe 1.3 y logró un triunfo impecable este año. Nos hicimos amigos cuando vinimos por primera vez a correr y luego compartimos muchos momentos cuando el corría con el Autobianchi.

Quiero agradecer a todo el equipo español que nos atendió en carrera y que es propietario del auto; a Jorge Fontana, que se vino desde Arrecifes a compartir con nosotros esta carrera y trabajar en cada fin de etapa con el auto y estar siempre atento a cada cosa que necesitáramos, y a Martín, que hizo un gran trabajo como navegante.”