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Trastornos del sueño, lo que hay que saber

Cada 17 de marzo se celebra el Día Mundial del Sueño con la finalidad de prevenir y manejar los trastornos del sueño, así como también para fomentar los beneficios que tiene para la salud y el bienestar personal

El dormir es uno de los procesos vitales más importantes para el ser humano, ayuda a mantener la mente y el cuerpo sanos, por ende, la falta de sueño, puede traer consigo varios problemas de salud.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 40% de la población mundial padece algún tipo de trastorno de sueño, es decir, que duerme mal. Si bien este porcentaje no quiere decir que todos tengan un trastorno severo del sueño, sí tienen alguno de sus ingredientes, como, por ejemplo, un trastorno puede ser demorarse en conciliar el sueño o bien despertarse en la mitad del sueño y no poder volver a dormir. Lo cierto es que dormir menos horas de lo recomendado impacta de manera directa en el cuerpo y conlleva trastornos fisiológicos y psíquicos, como lo son el estrés o la ansiedad, además de impactar de manera negativa en nuestra rutina al día siguiente.

Cada 17 de marzo la Asociación Mundial del Sueño celebra el Día Mundial del Sueño, este año el lema es “El sueño es esencial para la salud”, con el objetivo de visibilizar y sensibilizar sobre la importancia que tiene dormir bien. Al mismo tiempo se busca prevenir y abordar los trastornos del sueño.

Trastornos del sueño según la OMS

Los trastornos del sueño son problemas y cambios en el modo de dormir. Estos pueden afectar el estado de salud general, la seguridad y la calidad de vida de las personas. La falta de sueño, además, puede afectar la capacidad para conducir de manera segura y aumentar el riesgo de padecer otros problemas de salud.

Estos incluyen dificultades para conciliar el sueño o permanecer dormido, quedarse dormido en momentos inapropiados, dormir demasiado y conductas anormales durante el sueño. La mayoría de los trastornos del sueño son prevenibles y tratables, pero menos de un tercio de los enfermos buscan ayuda profesional.

La OMS recomienda dormir, al menos, seis horas diarias para mantener un equilibrio en el organismo y, por tanto, en el rendimiento diario. Lo óptimo en una persona adultas, serían entre 7 y 8 horas diarias. Pero más allá de la cantidad de horas que se recomienda dormir, es importante también la calidad de esas horas de sueño, que tengas un horario constante y habitual para dormir, de modo que te sientas descansado cuando te despiertes. El estrés, el sedentarismo y una mala alimentación son factores que influyen de forma negativa a la hora de dormir bien. Los problemas de salud que conlleva para el organismo son muchos, desde dolencias digestivas y aumento del apetito hasta reducción de los reflejos y problemas de concentración.

Dormir mal, según la Organización Mundial de la Salud, altera el funcionamiento del organismo y puede provocar dolencias más graves si la situación se prolonga en el tiempo.

Día Mundial del Sueño

El Día Mundial del Sueño es una celebración anual en la cual se tratan temas relacionados con el sueño, un elemento esencial para la vida humana y se abordan también sus posibles trastornos.

Una conmemoración donde participan distintos profesionales y expertos en la materia, para dar a conocer la importancia en la prevención y los posibles tratamientos a los problemas del sueño que, cada día, afecta a un gran número de personas en todo el mundo. El lema de este año es “El sueño es esencial para la salud”, con el objetivo de visibilizar la importancia que tiene dormir bien y de prevenir y abordar los trastornos del sueño.

Consecuencias

De acuerdo a los últimos estudios realizados sobre el sueño, se llegó a la conclusión de que nuestra calidad de vida mejoraría notablemente si dedicáramos el tiempo suficiente a tener un sueño de calidad. Sin embargo, en el mundo agitado de hoy, la mayoría de las personas no logran descansar la cantidad de horas que se requieren para tener un sueño reparador. Dormir poco o mal se ha convertido en una epidemia mundial y es factor de riesgo de múltiples problemas de salud, que van más allá de la simple fatiga, según indica la OMS.

La falta de sueño trae como consecuencia daños irreparables a la salud y la calidad de vida de las personas, afectando a un alto porcentaje de la población a nivel mundial. La Asociación Mundial del Sueño describe los principales tipos de trastornos del sueño y refuerza la importancia de identificarlos a tiempo para trabajar en resolverlos.

Apnea del Sueño: patrones anormales en la respiración durante la etapa de sueño, interrumpiendo el sueño profundo.

Insomnio: dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido.

Narcolepsia: somnolencia extrema o trastorno crónico del sueño durante el día.

Síndrome de las piernas inquietas o enfermedad de Willis-Ekbom: impulso de movilizar las piernas al tratar de dormir, así como sensaciones de hormigueo, ardor y comezón.

Dormir mejor

Para cumplir con la recomendación de la OMS de dormir al menos seis horas cada día, hay algunos hábitos llamados de higiene del sueño que también te pueden ayudar. Eso sí, si el problema persiste en el tiempo y, sobre todo, si los síntomas son graves es importante acudir al médico. Tres son los elementos para un sueño de buena calidad: la duración del sueño, que debe ser suficiente para que la persona se sienta descansado y alerta al día siguiente. Los períodos de sueño deben ser continuos y sin fragmentación. Y por último el sueño debe ser lo suficientemente profundo como para ser restaurador.

Entre los buenos hábitos a la hora de dormir, los expertos coinciden en que llevar una rutina a la hora de acostarse y levantarse es imprescindible. También ayuda practicar deporte con regularidad, comer de forma saludable y cenar ligero y, por supuesto, evitar la cafeína, el alcohol y las bebidas energéticas a partir de la tarde.

Por Julieta Varroni