AnkaLoo no aparece y los vecinos piden que no les “den la espalda”
Esta semana se inauguró en nuestra ciudad un nuevo espacio gastronómico comercial en uno de los lugares más importantes que tiene Río Cuarto para desarrollar como ciudad (y una de las grandes deudas urbanísticas): la costanera de nuestro río.
Se trata del Paseo Linné Costanera, emprendimiento desarrollado por un grupo de empresarios locales y cuya inauguración contó con la plana mayor del Municipio y del Centro Cívico de Río Cuarto.
En dicha oportunidad, los propietarios de este nuevo emprendimiento, acompañados por un grupo de vecinos, volvieron a reiterar el pedido al intendente Llamosas para que interceda ante las autoridades provinciales para que de una vez por todas finalicen las obras de la ruta 30.
Precisamente en el sector, este mismo grupo de empresarios tiene el primer Patio Linné y, como ellos mismos contaron en reiteradas ocasiones, viene padeciendo las penurias de una obra que comenzó en octubre y hoy no solamente que sigue inconclusa sino que prácticamente no se ve actividad por parte de la empresa que desarrolla la obra.
Cabe recordar que AnkaLoo Construcciones es la firma que ganó la licitación y, si bien hace algunas semanas trascendió que había sido emplazada por la Provincia para que reactivara la labor, los propios vecinos y comerciantes del sector manifiestan que la misma está prácticamente abandonada.
“Hemos invertido una gran cantidad de plata apostando a la ciudad de Río Cuarto, ahora no nos pueden dar la espalda, es muy triste”, manifestó uno de los empresarios responsables de los locales comerciales y en este caso representando a más de 40 comerciantes y vecinos de la zona.
Además, los reclamos no recaen solo en la empresa AnkaLoo Construcciones, sino que apuntan al gobierno provincial: “Hoy por hoy la mayor responsabilidad viene de la mano de la Dirección de Vialidad Provincial (cuyo titular es el riocuartense Martín Gutiérrez), que es la encargada de coordinar el trabajo de la empresa y hacer valer los tiempos de ejecución de la misma. En diciembre la empresa paró la obra 20 días porque se fueron de vacaciones y nadie dijo nada”, agregó el empresario Gustavo Garelli en una nota brindada a Canal 13.
“No hay que ser técnico sino tener sentido común para entender que una obra no puede perjudicar a tanta gente”, agregó uno de los propietarios de Patio Linné.
Queda claro que los días pasan y las respuestas no llegan. En el medio están los vecinos y comerciantes del sector que ven cómo día a día su vida y sus trabajos siguen siendo un caos. Además de la gran cantidad de personas que circulan por el ingreso a la ciudad, que se encuentra en un estado verdaderamente deplorable.
¿Habrá alguna solución a corto o mediano plazo o, como dijo el gobernador Martín Llaryora al recorrer la fallida autovía que debería unir Río Cuarto con Holmberg, será otro “monumento al abandono”?