En un clima de mucha emoción y fiesta, los Celestes pudieron celebrar junto al equipo que se abrazó en cada festejo de gol. El primer gol lo convirtió el delantero Javier Ferreira, mientras que el atacante Lucas González sentenció el triunfo. Cabe recordar que en el partido de ida habían empatado sin goles, pero lo cierto es que ahora el conjunto del Imperio se clasificó a la semifinal del Reducido y continúa soñando con el ascenso a Primera División del fútbol argentino.
En diálogo con el propio Iván Delfino, DT del equipo que supo conducir con honores a sus jugadores en cancha, se pudo observar a un técnico que confió y confía en su plantel en cada cancha jugada. “Esto es lo que veníamos buscando. Enfrentamos a un equipo que nos costó mucho, en un primer tiempo, encontrar la pelota porque hubo juego directo de los dos lados. Pero a partir del gol pudimos manejar el partido”, dijo el DT. Y agregó que más allá de contar con un jugador más en cancha, los Albos se mostaron aguerridos tanto en el duelo de ida como la vuelta en Río Cuarto.
Ante la consulta sobre cómo se siente en esta altura de la competencia dijo: “Estoy tranquilo. Los latigazos han castigado mucho tiempo y ahora todos podemos decir que más allá de las decisiones o de las cosas que yo pueda determinar no dependemos de nadie más que de nosotros. Aprendí mucho más a observar que a gritar como loco al costado de la cancha”, manifestó el experimentado técnico.
Agregó, a su vez, en líneas generales, que además de ser un partido que les perimitió pasar de fase, también se convirtió en una fiesta que reunió a cientos de socios e hinchas que dijeron “presente” para acompañar con gran ilusión a todo el equipo y que eso se hizo sentir en la cancha.
Sobre los goles y las posibilidades de gol, reiteró que siempre dirá lo mismo de sus jugadores: “El equipo responde cuando tiene que responder y eso es una virtud de los propios jugadores que salen cada fin de semana” .
Ante la consulta sobre su planteamiento en cancha y cómo dispuso el esquema tanto de visitante como local, expresó que tiene muy claro que sus jugadores pueden cubrir los puestos que necesita a la perfección. “Tal como el caso de Mauro (Valiente) que en el duelo de ida le tocó jugar y ahora ir de atrás. Es un claro ejemplo de que es un jugador terrible, de gran ayuda ofensiva y defensiva. Tiró un par de centros y uno concluyó en el gol del Topo; y como él, muchos otros que cuando uno los necesita están ”, apuntó Delfino.
Finalmente, sobre lo que viene y habiendo dirigido muchos partidos en estas instancias que siempre ponen a prueba la ansiedad o las expectativas, la cabeza de equipo se lució en cada presentación y la del viernes en el Candini no fue la excepción. Delfino se mostró atento y muy determinante en cada indicación sin perder la cordura; sus jugadores consultan al banco y la respuesta es inmediata. La experiencia en el rol y el temple se notan, y es parte de todo el proceso que hace que hoy los Leones del Imperio estén donde están.
“Uno tiene que enteneder que el fútbol es así. Obvio que nos mentalizamos para lo que viene de la mejor manera. Toca descansar, mirar los cruces del fin de semana y esperar a saber quién será el nuevo rival de turno. Lo mismo le digo a los jugadores, toca ser intelig entes y estar enfocados en lo que viene. Hay que llegar muy bien desde lo físico y lo mental y nos preparamos para lo que toque”, cerró el santafesino, que una vez más puso a vibrar a los hinchas de Estudiantes que coreaban su nombre post partido ya clasificados a semifinales.
