El campo y la tecnología dan otro paso fundamental en Río Cuarto y la región con la integración de un hub conformado por representantes de la ciencia y la investigación, las startups del sector, empresas de venture capital y el apoyo de los gobiernos provincial y municipal para consolidar todo lo realizado hasta aquí, y que posiciona a la zona como un punto de atención en el universo Agtech, y facilitar el crecimiento de nuevos proyectos que puedan escalar sobre cuatro verticales que serán los pilares de este ecosistema: agricultura, ganadería, biotecnología y sustentabilidad.
En diálogo con I+I Córdoba, Álvaro Fernández, representante de SeedMatriz y flamante presidente de Hub4, aseguró que esta nueva construcción se trata de un ecosistema “que debe trabajar coordinado, porque si cada actor está en lugares y direcciones distintas, no funciona. Se necesita una coordinación y alguien tiene que dar el puntapié inicial. Y los más necesitados somos las startups bajo la idea de que las universidades no desaparecen, ni las venture capital tampoco, pero las startups sí”, explicó el emprendedor.
“Si no unimos fuerzas, podemos tener más dificultades. Así fue como arrancó esta idea y queremos ser el puntapié del ecosistema. Porque hay muchos componentes y muy fuertes para comenzar a integrarlos: universidades, gobiernos provinciales y municipales que ayudan mucho y no molestan, que no es algo menor, y muchas empresas y emprendedores con ganas de hacer cosas. Sumemos a los productores agrícolas con bolsones y capacidad de financiar proyectos. Después contamos con aeropuerto, estamos geográficamente en el centro del país y en un lugar en el que más y mejor maíz se produce en el mundo. Hay varios componentes y lo que tratamos de hacer con esta iniciativa es amalgamarlos de alguna manera como para que nos dé una ventaja adicional para poder salir a competir al mundo”, indicó Fernández.
¿Cómo imaginan el funcionamiento del hub?
Va a funcionar de manera similar al de una cámara tradicional pero con una impronta que queremos sumarle con más peso de la innovación y globalización. Puertas adentro va a tener una presidencia de un año y luego mirando siempre la internacionalización de las compañías. Y de hecho ya tenemos agendado para fin de mes un viaje a los Estados Unidos para firmar una serie de convenios con la intención de darle entidad desde un primer momento. Pero todo tiene que estar mirando eso, para que las empresas que se generen acá no sean pymes para vender a localidades vecinas, que no estaría mal, pero buscamos que sean empresas innovadoras que puedan insertarse en el mundo.
Que los desarrollos sean atractivos para el exterior…
Exacto. Porque si hacemos algo que sea sólo relevante para la zona, después llega alguien de afuera con mejores costos y propuestas a mejor valor y funde a la empresa local en su propia casa. Cuando se piensa de manera global permanentemente se está pensando en qué hacen los competidores, cómo lo puede hacer uno mejor, y generando acciones para que no te ataquen en tu propio mercado. Ese es el elemento rector desde que nos comenzamos a reunir: la idea fue siempre tener empresas globales para que no sea sólo Mercado Libre, o alguna de esas las únicas a esa escala de la Argentina. Por eso la intención es generar desde el agro, donde hay pocos casos como Bioceres, empresas que sean la punta de lanza. Ahí estamos apuntando. Y por eso en el nombre, que incluye el 4 por la relación con Río Cuarto, también se reflejan las cuatro verticales: agricultura, ganadería, biotecnología y sustentabilidad. La intención es que cada uno de los miembros pueda estar en al menos dos de esas cuatro verticales.
¿Es un clúster más específico el que se construye con Hub4?
Es un clúster en definitiva pero la idea de hub marca una apertura mayor porque queremos que Río Cuarto y nuestra zona sea un lugar al que puedan venir otros de afuera, meterse en este mundo y desde acá saltar a otro lado. Somos un clúster de empresas con la idea de potenciarnos individualmente y desde lo colectivo. En Río Cuarto y la región están dadas todas las condiciones como para que vengan otras empresas de afuera o gente que quiera emprender en tecnología para poder hacerlo. Material hay, lo que falta son condiciones y expectativas y en eso vamos a trabajar.
Hay conocimiento, investigación, capital, emprendedores y materia primar para dar un salto…
Sin dudas, y sumemos al productor agropecuario que está a dos minutos de cualquiera de estas empresas de Río Cuarto y que tiene un perfil muy volcado a lo tecnológico. El productor argentino es muy bueno, de los mejores del mundo. Tuvimos la oportunidad de estar en Estados Unidos y valoramos realmente lo que es el productor argentino que por las condiciones desfavorables y el contexto negativo que siempre lo rodea se fue especializando y tecnificando y es alto adoptador de tecnología. Y eso es muy bueno porque cuando un emprendedor viene con una idea necesita de alguien que la pruebe, no puede ser solamente una idea de garaje; alguien la tiene que probar y validar. Eso es muy interesante e importante.
Este hub ya está en funcionamiento…
Sí. En la Rural hicimos una presentación previa del hub y ahora exponemos las cuestiones más formales. Estamos presentando la conformación de la asociación civil para darle cuerpo legal también a la iniciativa. Y la verdad que la mejor forma de presentarnos fue con una charla a cargo de Lisandro Brill que es una de las personas que arrancó con esto del venture capital en los ’80 tomando el modelo israelí que lo relataba acá y nadie lo entendía en ese momento. De a poco se fue entendiendo y adoptando, y hoy es lo que es.
Gonzalo Dal Bianco