El Sindicato de Trabajadores Municipales - Suoem calificó de “alto” el grado de acatamiento al paro de ayer, con presencialidad en los lugares de trabajo pero sin atención al público, por reclamo salarial.
Hubo cruces entre los dirigentes gremiales y los funcionarios municipales.
Por ejemplo, en el edificio de la Secretaría de Economía, se cruzaron el titular de esa cartera, Pablo Antonetti, con la comisión directiva del Suoem, encabezada por Jorgelina Fernández.
El funcionario municipal les recriminó no dejar entrar a Economía a contribuyentes que querían pagar sus impuestos, pero los dirigentes sindicales retrucaron que se encontraban en la entrada del edificio municipal de calle Constitución para informarle a la gente sobre la medida de fuerza.
Lo mismo sucedió en el Centro de Salud, pero la situación allí adquirió un voltaje mayor, a tal punto que el Municipio denunció al gremio ante la Justicia, según indicaron fuentes municipales.
“Somos respetuosos de la protesta gremial, pero no se puede avanzar sobre el derecho de los vecinos”, manifestó el subsecretario de Gobierno y Comunicación, Gastón Maldonado.
Y añadió: “Un grupo de gremialistas está asumiendo actitudes preocupantes, ya que esta mañana ha entrado en la sala de espera del Centro de Salud de la calle Cabrera y ha retirado a los vecinos que se encontraban esperando atención médica”.
“Había médicos y personal administrativo que no se encontraba haciendo paro. Hay que ser respetuosos con la medida de fuerza, pero también debe haber respeto y tolerancia para con quien no quiera acompañarla”, aseguró Maldonado.
“Somos respetuosos de la protesta gremial, pero no se puede avanzar sobre el derecho de los vecinos”, se quejó.
Y finalizó: “El fiscal municipal se encuentra al tanto de la situación, con todas las pruebas existentes para avanzar con las acciones legales (ante la Justicia)”.
Suoem volvió a reclamar al gobierno ser atendido.