Ante el apoyo de sus hinchas que se hicieron presentes a pesar de la incesante lluvia en Santa Fe, el Tatengue demostró rápidamente en los primeros minutos querer recomponerse de la dura derrota ante el Matador. A través de buenos enlaces y combinaciones, el conjunto local convirtió a Ignacio Arce en una de las incipientes figuras, aunque a veces, necesitó que la suerte lo acompañe, como en el remate cruzado de Nicolás Orsini a los 24 de la primera parte que dio en el palo.
Sin embargo, pese a que el equipo del Kily González tuvo la posesión de la pelota y controló sin problemas los primeros 45 minutos del cotejo, también le faltó la estocada final que hizo que ambos equipos se marcharan al entretiempo sin sacarse diferencias.
Ante el apoyo de sus hinchas que se hicieron presentes a pesar de la incesante lluvia en Santa Fe, el Tatengue demostró rápidamente en los primeros minutos querer recomponerse de la dura derrota ante el Matador. A través de buenos enlaces y combinaciones, el conjunto local convirtió a Ignacio Arce en una de las incipientes figuras, aunque a veces, necesitó que la suerte lo acompañe, como en el remate cruzado de Nicolás Orsini a los 24 de la primera parte que dio en el palo.
Sin embargo, pese a que el equipo del Kily González tuvo la posesión de la pelota y controló sin problemas los primeros 45 minutos del cotejo, también le faltó la estocada final que hizo que ambos equipos se marcharan al entretiempo sin sacarse diferencias.
Del otro lado de la vereda, se notó con claridad la disconformidad del Ogro Fabbiani con el equipo: en el entretiempo, el entrenador de Deportivo Riestra hizo tres cambios en el once inicial con el objetivo de cambiarle la cara al combinado que demostró poco y nada en el Estadio 15 de Abril.
No obstante, lejos de cambiar, la dinámica fue la misma que en la primera parte: Unión siguió con su característico dominio, pero las grandes respuestas del arquero del Malevo hicieron que las cosas culminen en un apático empate.