En los primeros días de septiembre la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) registró la vacuna para personas gestantes contra el virus sincicial respiratorio. El anuncio se realizó en el marco del Consejo Federal de Salud, y la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti lo celebró junto a las y los ministros y ministras de Salud de las provincias. Este virus produce la mayor tasa de hospitalización por infecciones respiratorias en menores de un año.
La autorización por parte del organismo se produce dos semanas después de que tanto la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos como la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) registraran la vacuna, en base a estudios clínicos que demuestran su eficacia y seguridad. Cabe destacar que la vacuna fue autorizada por ANMAT, al igual que por FDA, para su uso entre las semanas 32 y 36 del embarazo.
En ese contexto, la ministra Vizzotti dijo que “se trata de una herramienta muy importante en el marco del abordaje integral del virus sincicial respiratorio y dada la estacionalidad de la circulación de este virus, la oportunidad de la decisión de los pasos a seguir es clave”. Además destacó “el rol de ANMAT que hizo el análisis en tiempo real, a la par de las entidades regulatorias de Estados Unidos y Europa, con contacto directo con el laboratorio productor para poder tener en Argentina la posibilidad de avanzar rápidamente en este sentido”.
El Esp. Enrique Casanueva (MN 55133), docente de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral, y médico consultor del servicio de Infectología Infantil del Hospital Universitario Austral dijo que “la bronquiolitis afecta especialmente a los lactantes, a niños prematuros y a quienes tienen alguna disfunción pulmonar o problema cardíaco”.
Si bien empezó a asomarse la primavera, siguen notificándose casos de bronquiolitis, una infección respiratoria aguda que afecta, sobre todo, a los niños menores de 1 año. Se estima que el 1% de los contagiados requiere internación; de hecho, es la principal causa de internación por infecciones respiratorias a nivel mundial.
En Argentina, anualmente, mueren alrededor de 150 a 200 niños menores de 5 años por infecciones respiratorias; representan la tercera causa de muerte después de las muertes perinatales, y las anomalías congénitas y cromosómicas, según recopila un artículo publicado en 2020, en los Archivos Argentinos de Pediatría.
Desde hace décadas, se busca desarrollar una vacuna efectiva. Finalmente, la ANMAT acaba de aprobar una vacuna de Pfizer que se aplica en las embarazadas entre las semanas 32 y 36 de gestación, con el fin de proteger a los bebés del virus sincicial respiratorio (VRS), el principal responsable de la bronquiolitis. Se trata de una inyección única, intramuscular, que provee protección durante los primeros seis meses de vida y que ya fue aprobada en Estados Unidos por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos).
Una vacuna de gran impacto
Según el Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud, a la semana 34 (del 20 al 26 de agosto), los casos de bronquiolitis reportados sumaban 154.102 en lo que va del 2023. A pesar de los daños que suele causar, no ha recibido tanta atención como la gripe o la Covid-19, hasta ahora. El cambio podría deberse, en parte, a que el último invierno trajo una “tripledemia” a nivel mundial, en la cual convivieron los virus de la influenza, la Covid y el virus sincicial respiratorio.
“Esta vacuna beneficia a lactantes no prematuros, porque justamente se aplica entre las semanas 32 y 36 de embarazo. En el caso de los prematuros menores de 32 semanas se utiliza otro tratamiento específico”, detalla Casanueva.
Explica que la estrategia de la nueva vacuna es inocular a la embarazada, para que el niño nazca con los anticuerpos. A 90 días después del nacimiento, la vacuna demostró una reducción del riesgo de infección grave en el 91,1% de los casos. Y, a 180 días, del 76%. “Es una eficacia muy interesante, no solo para que no se infecten, sino para evitar las hospitalizaciones. Esta vacuna contra el virus sincicial respiratorio en embarazadas evitará cientos de internaciones de lactantes por bronquiolitis”, resalta.
Existen casos de bronquiolitis en chicos más grandes y en adultos, pero rara vez terminan en una internación. El otro gran grupo beneficiado por la vacuna sería el de adultos mayores de 60 años. “Se espera que sea una vacuna de gran impacto, porque se sabe que la bronquiolitis en países poco desarrollados es más grave”, afirma Casanueva.
Más allá de la vacuna, ¿cómo prevenir la bronquiolitis?
El experto consultado aporta algunas recomendaciones adicionales para evitar los contagios, entre ellas: no fumar cerca de los niños, ni siquiera al aire libre; evitar llevar a un niño con tos, fiebre y otros síntomas al jardín (especialmente si es un jardín maternal); amamantar, en lo posible; tener el calendario de vacunas al día. La gripe, la neumonía y la tosferina, al coexistir, pueden agravar un cuadro de bronquiolitis.
Entre los síntomas principales de bronquiolitis para consultar con urgencia al médico, se destacan: respiración muy rápida; aleteo de la nariz; se hunde el pecho y se marcan las costillas al respirar; el bebé se queja al respirar; le cuesta prenderse al pecho, está irritable o le cuesta dormir; presenta un color azulado en la piel, uñas o labios por falta de oxígeno.
Por Fernanda Bireni