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Estiman más de 660 mil hectáreas perdidas en los cultivos estivales

El último informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba señala que crecen los lotes en estado malo y regular. Lo sufrido en soja, maíz, maní, sorgo y girasol, sumaría lo calculado en pérdidas en lo que va del ciclo

Al 23 de enero, el reporte de la Bolsa de Cereales de la provincia de Córdoba, analiza los cuatro cultivos principales de esta campaña gruesa que enfrenta un contexto climático adverso.

En la campaña 2022/23 de maíz se sembrarían 3,3 millones de hectáreas climáticas adversas que han venido sufriendo los cultivos, entre éstas la falta de precipitaciones, las altas temperaturas y, en algunos sectores, la caída de granizo. Por el momento, se prevé que el 11 % del área ya se habría perdido, representando un total de 350 mil hectáreas aproximadamente. Las zonas más golpeadas de la provincia serían las del sudeste (departamentos Marcos Juárez y Unión) y noreste (departamento San Justo), teniendo hasta el momento una pérdida del 30 y 21 % respectivamente.

El 30 % de los lotes se encuentran en condiciones regulares y malas. Desde el momento de inicio de implantación del cereal, el área en este estado ha ido aumentando progresivamente. En este sentido, los lotes más afectados serían aquellos sembrados en fechas tempranas debido a que han atravesado su período de definición de rendimiento con nulas o escasas precipitaciones, altas temperaturas e incluso daños por granizo. En el caso de los maíces tardíos, están comenzando a transitar su período crítico y podrían verse beneficiados por las últimas lluvias ocurridas durante enero.

En relación con plagas, se han reportado ataques de oruga cogollera, chinche de los cuernos y oruga de la espiga, todas en baja a media incidencia. Respecto a enfermedades se ha mencionado presencia de roya común del maíz y tizón foliar focalizados en los departamentos Marcos Juárez y General San Martín, ambas en baja incidencia.

La superficie de soja en Córdoba sería de casi 4 millones de hectáreas, las cuales habrían terminado de sembrarse a mediados de enero. Para la oleaginosa también se realizaron las estimaciones de área perdida y a nivel provincial se estima una merma del 8 %, significando 300 mil hectáreas. Las regiones más afectadas serían las mismas que en el caso del maíz, en este cultivo con una pérdida del 14 % tanto en la zona sudeste como noreste. En este cultivo, se prevé que las pérdidas serían menores debido a que, en general, los lotes sembrados en fechas tempranas aún no están atravesando su periodo de definición de rendimientos, por lo que las lluvias ocurridas en el mes en curso podrían haber actuado en la recuperación de estas parcelas.

La mayor parte de los lotes se encuentran finalizando sus etapas vegetativas y transitando los primeros estadios reproductivos. Las condiciones meteorológicas predominantes causaron que más del 35 % de la superficie refleje un estado general regular y malo. En general, se ha reportado repetitivamente la aparición en toda la provincia de plagas como arañuelas, trips y oruga bolillera en incidencia variable según la zona. Por otro lado, se han mencionado apariciones puntuales de oruguita verde de la verdolaga, vaquita defoliadora, bicho bolita y complejo de chinches.

Respecto del sorgo, a la fecha, se encuentran sembradas las 136 mil hectáreas planificadas para esta campaña. Debido a las mencionadas condiciones climáticas que enfrentan los cultivos, se estima que se han perdido casi 5.400 hectáreas, representando el 4% de la superficie total.

Según el reporte de los referentes técnicos zonales de la provincia, algunos lotes estarían comenzando a definir su rendimiento y más del 40 % de la superficie manifiesta un estado general malo y regular, agravado por la presencia de pulgón amarillo y oruga cogollera.

En maní, la BCCBA indica que durante el mes de diciembre finalizó la siembra de las 250 mil hectáreas destinadas a maní en Córdoba. La falta de agua, las altas temperaturas y la caída de granizo en algunas zonas ha repercutido en el número de hectáreas perdidas, las cuales serían unas 6.700, aproximadamente el 3 % del área implantada.

A la fecha del relevamiento, el 50 % de los lotes ya habían comenzado a establecer su rendimiento y los lotes evidenciaban un buen estado general, con el 60 % de la superficie en estado muy bueno y bueno. En cuanto a las plagas, únicamente se ha reportado el ataque de arañuela con grado de incidencia variable según la zona.

Finalmente, en cuanto al cultivo de girasol, se prevé que se sembraron casi 93 mil hectáreas en la provincia y el cálculo de área perdida arroja casi 1.600 hectáreas, siendo un 2 % de la superficie inicial. A la fecha, la totalidad de los lotes están transitando o finalizando su período crítico, incluso algunos lotes ya finalizaron su ciclo y se encuentran en madurez fisiológica (R9).

Más del 50 % de los lotes se encuentran en muy buenas y buenas condiciones debido a la rusticidad del cultivo. Por otra parte, se observaron ataques de orugas defoliadoras como bolillera y medidora.

Contexto climático

Durante el último trimestre del 2022 el aporte pluviométrico fue menor al promedio histórico (2007-2021) en toda la provincia de Córdoba. En el mes de enero ocurrieron algunas precipitaciones que permitieron, en algunos lotes tardíos, revertir el fuerte estrés hídrico que venían sufriendo.

Según el pronóstico a largo plazo generado por el International Research Institute for Climate and Society (IRI), el fenómeno de La Niña estaría en retirada, pero en el trimestre en curso se igualaría la probabilidad de condiciones neutrales. El Niño empezaría a aparecer a partir del próximo mes e iría aumentando su probabilidad progresivamente.

Para los próximos días el Servicio Meteorológico Nacional espera precipitaciones entre 5 y 20 mm, con mayor milimetraje en la zona sur. Las temperaturas medias se encontrarían entre 24° y 28° C, siendo mayores hacia el noroeste.