El científico argentino que era intensamente buscando en Alemania fue encontrado muerto este domingo, de acuerdo a lo que informó la policía local.
Se trata de Alejandro Matías Fracaroli, un investigador del Conicet oriundo de la provincia de Córdoba que había viajado a la ciudad alemana de Karlsruhe, el sur de este país, cerca de la frontera con Francia y a menos de 100 kilómetros de Estrasburgo.
El investigador, radicado temporalmente en Alemania con motivo de una estadía académica, tenía previsto regresar a Argentina a comienzos de diciembre. Su viaje obedecía a la concreción de un proyecto de investigación conjunta entre la UNC y el Instituto de Tecnología de Karlsruhe (KIT), una de las entidades científicas más reconocidas de Alemania y Europa.
Fracaroli tenía 44 años y una destacada trayectoria como investigador. Era docente de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Córdoba y miembro del departamento de Química Orgánica. Su labor, reconocida nacional e internacionalmente, abarcó áreas como la química reticular y la nanotecnología, con énfasis en aplicaciones sustentables y orientadas al cuidado del ambiente.
Según informó la agencia de noticias EFE, el cuerpo fue hallado en una zona boscosa de Karlsruhe-Rintheim, dentro de un arroyo. Todo fue confirmado en un comunicado de la Policía alemana, que señaló como hipótesis principal un accidente: de acuerdo a las autoridades, el investigador habría caído por causas aún no fueron determinadas y se habría ahogado. Las circunstancias del suceso se encuentran bajo investigación.
El caso comenzó a movilizar a organismos científicos e instituciones el pasado lunes, día en que la familia de Fracaroli perdió el contacto con él. A partir de ese momento, tanto allegados como colegas y organismos argentinos como el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) emitieron pedidos públicos para colaborar con la búsqueda.