Los feedlots venían con fuerte envión y un panorama de crecimiento, especialmente en el núcleo central, conformado por Buenos Aires, sur de Santa Fe y sur de Córdoba, y también en la provincia de Salta, la cuarta jurisdicción en engorde a corral del país. Pero la llegada del coronavirus alteró ese horizonte y sumó un cúmulo de incertidumbre de la noche a la mañana que obligó al sector a extremar las precauciones mientras pulen rápidamente los protocolos sanitarios necesarios para sostener la actividad.
Juan Eiras, que esta semana fue reelecto presidente de la Cámara Argentina de Feedlot por el período 2020-2021, analizó el abrupto cambio de perspectivas con Tranquera Abierta: “Hoy está el gordo, está el ternero al pie de la madre y está el maíz porque tenemos en marcha una muy buena campaña. Lo que no tiene el negocio hoy es horizonte porque no sabemos cómo sigue. No sabemos ni cuándo termina ni cómo. Uno habla con el consignatario y la pregunta es si un ternero es barato o caro, si compramos mucho o poco. Si esto se para porque se torna más grave, es mejor tener poca hacienda que mucha. Son interrogantes sin respuesta real y con mucha incertidumbre, que muchas veces paraliza. Y mientras tanto sabemos que lo peor todavía no llegó. El negocio, si lo tomamos como foto, no es malo hoy pero tiene un futuro incierto”, alertó el directivo que ya había conducido la cámara entre 2006 y 2010, cuando se vivió el conflicto con el campo.
“El problema nuestro es que la vaca sigue creciendo, no lo podemos meter adentro de un bolsón. La actividad venía con buen ritmo y no podemos frenar de golpe. Y en el sistema financiero vemos achique en el margen para vender cheques y en el giro en descubierto; al revés de lo que debería ser en estos momentos”, se quejó Eiras.
La Cámara tiene presencia en todo el territorio nacional y es allí donde apunta justamente la renovada gestión para profundizar lazos en las provincias. “Apuntamos a una proyección relacionada a la profesionalización de la gestión y a la federalización con presencia real. Tenemos presencia en todas las provincias que tienen engorde a corral pero queremos lograr más visitas, más jornadas, encuentros feedloteros. Queremos reafirmar ese camino por eso vamos a tratar de hacer lo mejor posible”, dijo.
Eiras remarca que la zona con más actividad, el núcleo central, es Provincia de Buenos Aires con el sur de Santa Fe y el sur de Córdoba. “Cuando uno mira el mapa se observa que el feedlot está más pegado al maíz que a la cría. Está concentrado en las zonas maiceras. Fuera de eso, Salta se destaca por el maíz y los forrajes tropicales con un clima húmedo, y es la cuarta provincia en importancia a nivel nacional”, indicó el presidente de la Cámara a Tranquera Abierta.
Frente al avance de la pandemia, Eiras indicó que “primero tenemos el mismo temor que tenemos todos. Pero después, despertó un fenómeno de responsabilidad social en términos de abastecimiento de carne a la población; y mirando de tranquera para adentro, el cuidado personal y el de nuestra gente. Y lógicamente en ese primer momento nos preguntamos cómo hacíamos con el manejo de los animales y la operatoria en general para absatecer a la faena. La primera semana hubo muchas dudas pero hoy diría que está funcionando cercano a la normalidad, con mucha precaución”, describió.
Y puntualizó: “No hay contacto con los camiones, se pesan sin contacto, no hay firma de remitos, todo lo posible se evita. Las máquinas tienen su operario fijo y no ya rotativo como podíamos tener en otro momento. A la pala que carga la maneja una sola persona. En el feedlot no tenemos obligatoriamente tareas con contacto físico, y eso es una ventaja. El manejo de la hacienda y de la alimentación podemos tener distancia”.