En las vísperas de los resultados electorales en Estados Unidos, el vocero presidencial, Manuel Adorni, evitó pronunciarse por alguno de los dos candidatos que compiten por la presidencia y anticipó que el Gobierno nacional reconocerá el resultado se imponga quien se imponga.
Los reñidos vaticinios sobre la performance electoral de la demócrata Kamala Harris, quien se enfrenta al republicano Donald Trump, obligan a Casa Rosada a ocultar su favoritismo por el empresario y a plantear que el alineamiento de la Argentina es con Estados Unidos.
En la habitual conferencia de prensa y pese a las advertencias de Trump, el vocero señaló: "Los resultados siempre se reconocen.
Siempre que haya una elección en la que prevalezca el sentido democrático y las reglas del juego de la democracia".
"Cuando se conozca el resultado, por supuesto que el Presidente va a reconocer", insistió, y agregó: "Si la intención es compararlo con Venezuela, lejos están una de la otra. Una es una dictadura, la otra una democracia".
Cuando las cámaras se apagan, en la administración libertaria se ilusionan con un triunfo del representante del Grand Old Party, y albergan la esperanza de que la victoria simplifique las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
De imponerse Trump, el presidente Javier Milei no descarta volver al país norteamericano por séptima vez para dar el presente en la asunción que será el 20 de enero en el edificio del Capitolio ubicado en Washington para celebrar la consolidación de una alianza ideológica y estratégica.