Eugenia Martina, secretaria de Finanzas, Desarrollo Productivo, Planeamiento Estratégico y Ambiente, explicó a Puntal que este proyecto nace de la necesidad de regularizar y controlar los alimentos que se producen y venden en la localidad. “En Elena, tenemos 72 establecimientos que manipulan alimentos, ya sean productores, elaboradores o intermediarios en la cadena de comercialización. Sin embargo, solo una industria contaba con el carné de manipulador de alimentos, gestionado en Buenos Aires. Con la intendenta Romina Aguirre, consideramos esencial que toda la cadena de comercialización y manipulación de alimentos tenga acceso a una capacitación, para garantizar la seguridad en los procesos”, destacó Martina.
La funcionaria subrayó la importancia de esta formación para generar conciencia entre los productores y comerciantes locales. “Cuando se acercan a las capacitaciones, la gente comienza a comprender los procesos y a aceptarlos. Queremos que nos acompañen en las inspecciones y revisiones, no buscamos clausurar negocios, sino hacer de Elena una localidad más productiva”, añadió.
Ordenanza
El proyecto incluye una ordenanza (649/2024) que establece requisitos básicos de seguridad para todos los comercios, como la instalación de matafuegos, luces de emergencia y señalización para salidas de emergencia. Además, se exigen condiciones específicas para los establecimientos alimenticios, incluyendo la habilitación según el Código Alimentario Argentino y la obligatoriedad de contar con el carné de manipulador de alimentos.
“El objetivo es crear un registro de los alimentos producidos en la localidad, protegiendo a los productores y brindando seguridad a los consumidores”.
Uno de los aspectos centrales de esta iniciativa es el etiquetado de productos alimenticios. Durante los cursos de capacitación, surgieron numerosas inquietudes relacionadas con el rotulado, desde la declaración de alérgenos hasta el registro de establecimiento. “En las jornadas que realizamos, abordamos la importancia de etiquetar los productos correctamente, algo vital tanto para el productor como para el consumidor. Esto no solo permite cumplir con la normativa, sino también proteger a quienes elaboran alimentos y a quienes los consumen”, afirmó Martina.
La funcionaria recalcó que el rotulado adecuado es crucial, especialmente en una población como Elena, donde muchos productos comestibles se comercializan dentro y fuera de sus límites. “El objetivo es crear un registro de los alimentos producidos en la localidad, protegiendo a los productores y brindando seguridad a los consumidores. Queremos que cumplan con los requisitos mínimos de etiquetado, incluyendo el nombre del elaborador, la fecha de elaboración y vencimiento, los ingredientes, y cualquier alérgeno relevante”, explicó.
Martina enfatizó que la implementación de esta medida no solo fortalece la industria alimenticia elenense, sino que también establece un nivel de trazabilidad y responsabilidad en toda la cadena productiva. “Estamos trabajando para acompañar a los pequeños productores y crear una industria alimenticia más sostenible y sólida. El consumidor siempre se beneficia de estas mejoras, aunque sea de manera indirecta”, concluyó.