Lucy’s House surgió como un emprendimiento familiar durante la pandemia, buscando ofrecer soluciones rápidas y de calidad en el sector constructivo. “Durante la pandemia no nos permitían trabajar, pero sí fabricar. Fue entonces que empezamos a desarrollar casas modulares de calidad 100% premium. Hoy, Lucy’s House, que comenzó como algo transitorio, se ganó su lugar propio”, expresó Santiago Ruiz, fundador de la compañía, en La Voz del Interior.
Con más de 220 módulos vendidos, Ruiz explicó que su propuesta no utiliza contenedores, sino una construcción basada en steel frame con aislación térmica, considerada tradicional. Estas viviendas pueden instalarse en cualquier punto del país y están diseñadas para ser trasladadas si el propietario lo requiere.
Personalización y tiempos de entrega como ventajas
La empresa ofrece tres modelos de vivienda: base, estándar y premium, con precios desde U$S 1.150 por metro cuadrado. La versión base está orientada a empresas que buscan funcionalidad en zonas de difícil acceso, mientras que las opciones estándar y premium son las más solicitadas por familias y complejos turísticos. “La calidad es la misma en ambas, pero la premium incluye adicionales como vidrios dobles y calefacción por radiadores”, detalló Ruiz.
Además, los clientes pueden personalizar sus pedidos, eligiendo entre viviendas, oficinas o locales comerciales con tamaños que van desde 20 hasta 300 metros cuadrados. El tiempo de entrega, de 45 a 60 días, brinda previsibilidad a los compradores.
Expansión regional
La empresa ya opera a nivel nacional, con entregas realizadas a más de 2.000 kilómetros de Córdoba. Ahora busca consolidarse en mercados internacionales, con Uruguay como el primer destino. “En ese país ya comenzamos con las ventas y estamos próximos a realizar la primera exportación”, aseguró el empresario. Asimismo, se trabaja en establecer representantes en Paraguay y Chile, y se proyecta incursionar en Brasil.
Ruiz enfatizó que las distancias no son un problema para la empresa. “Si hemos entregado soluciones habitacionales dentro de Argentina a más de dos mil kilómetros, podemos abastecer sin inconvenientes a Uruguay, Paraguay o Chile”.